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Un hombre será juzgado acusado de haber agredido, presuntamente, a dos médicos del CAP Sant Pere de Reus. El fiscal pide un año de prisión por un delito de atentado a la autoridad y el pago de dos multas de 480 euros cada una por dos delitos leves de lesiones. Asimismo, solicita el abono de una indemnización de 210 euros a uno de los facultativos –el otro no reclama– por las lesiones sufridas. El caso se verá en uno de los dos Juzgados de lo Penal de Reus.
Los hechos a juzgar se remontan a las nueve y media de la noche del 15 de mayo del año pasado. El acusado, de 53 años y de nacionalidad española, acudió al centro sanitario «en un estado de elevada alteración y nerviosismo, gritado y alterando el normal funcionamiento del centro mientras era atendido por la doctora (...)», dice el fiscal.
Pedir calma
El funcionario sanitario que se encontraba en el box cercano atendiendo a otro paciente decidió aproximarse al acusado y le requirió que se calmara y dejara de gritar. En este momento, el procesado, quien espetó al médico que ojalá pegaran a su hijo, le propinó puñetazos en la cabeza y en el resto del cuerpo. Debido a la agresión, el facultativo cayó al suelo.
La doctora que atendía al encausado estaba presente en todo momento en la agresión, por lo que intentó separar al acusado para evitar que siguiera agrediendo a su compañero. Y la médico también recibió diversos golpes.
A consecuencia de la agresión, el médico sufrió lesiones consistentes en una herida en la boca, equimosis faciales en la oreja y erosiones múltiples en el cuello, tórax y rodilla, además de una erosión en la región lumbar. La lesiones tardaron siete días en curarse y no estuvo ninguno de baja.
