Quince años de evolución femenina

23 octubre 2020 07:50 | Actualizado a 23 octubre 2020 08:25
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El Casal de les Dones de Reus ha cumplido 15 años y su trayectoria lleva consigo numerosas historias protagonizadas por mujeres, que han estado más o menos vinculadas a este espacio, pero que ha servido para juntarlas, para que puedan conocerse y, así, ayudarse y aprender. «Fomentar el diálogo entre mujeres es sano, no puedes ceñirte sólo a la familia. Por suerte, todo eso está cambiando. Nosotras hemos visto evolucionar varios aspectos de la sociedad. En 15 años, además, pasan muchas cosas», valora la presidenta de la Asociación de Mujeres Blanca Almendro, Ana García Pachón.

Desde la Asociación de Mujeres Latinoamericanas Madre Tierra, Fátima Peña, destaca que «es tarea de todas y todos hacer visible este espacio, pero también crear muchos otros más en los que se hable de diversidad de género y de la riqueza cultural que hay en la ciudad».

La escritora y coach Tsunamis García, vinculada también a Madre Tierra y al Círculo de Mujeres, expresa que «hay que celebrar los logros, pero aún hay mucho que hacer». «Hay que seguir insistiendo de cara al futuro. Trabajar en dar más apoyo a la mujer a través de la atención de profesionales especializados, ya sea en el caso de la violencia de género u otras problemáticas relacionadas. Y, hacer todo eso implica también incidir en la educación del hombre y la gente más joven, porque todo hay que gestionarlo y las relaciones humanas son muy complejas», apunta. Hacerse compañía y escucharse son cualidades de las que hablan repetidamente las personas entrevistadas para realizar este artículo. «La soledad es algo que tarde o temprano nos toca vivir y, con la llegada de la pandemia se ha vuelto más evidente. Desde nuestra entidad, nos hemos esforzado por adaptarnos a las nuevas tecnologías, para seguir dando apoyo a aquellas mujeres que más lo necesitan. Y es que en algunos casos se han hecho mayores o quedado viudas. O, sencillamente, necesitan estar ocupadas y, con nuestras actividades se mantienen activas», resume la presidenta de la Associació de Dones Ganxetes, Glòria M. Arnavat.

Feminidad y comunicación

Desde la concejalía de Participació, Bon Govern y Serveis Generals del Ayuntamiento de Reus, Montserrat Flores, habla de la evolución de las políticas de género desde que surgió el germen que daría lugar al Casal de les Dones. «Trabajamos en la diversidad y en la igualdad. En 2007, arrancó el primer plan de políticas de género, revisado periódicamente, y se trabajó con diferentes colectivos, porque el feminismo tiene mil y una maneras de comunicarse, así como la identidad de cada una. Por ello, se tenían que aplicar políticas transversales», completa, y pone como ejemplo el urbanismo feminista. También destaca la importancia del Servei d’Informació i Atenció a les Dones (SIAD) para visibilizar a las mujeres que sufren violencia de género o el punto de diversidad sexual, que «abre la puerta a una nueva realidad», expresa.

Además de la exposición fotográfica 15 anys D’ONAdes, donde se refleja de manera simbólica la participación de las mujeres en el Casal, se han programado más actividades (más información en redes sociales, @casaldonesreus). Entre los actos previstos, hay una presentación del libro Menos drama y más banana, de Jose Mola (29 octubre, 19h en el Casal de les Dones), un monólogo feminista de la humorista Penny Jay (5 de noviembre en Cal Massó, 19.30h), otra presentación del libro Dones i poder, de Jenn Díaz (12 de noviembre, 19.30h en el Casal de les Dones) y un espectáculo como cierre de la celebración llamado Rentadors, que irá a cargo de las Artistes Locals (12 de noviembre, 19.30h, en el Casal de les Dones, en los ‘rentadors’).

Anteayer, por otro lado, se realizó una charla telemática de la socióloga y comunicadora Blanca Moreno –Dones i pandèmia: decisions amb èxit–. El objetivo fue analizar la gestión de la Covid-19 desde la perspectiva de género. El webinar abrió el debate sobre las decisiones y los resultados obtenidos en la gestión de la pandemia por parte de diferentes mujeres y jefes de estado. Para participar en las actividades se requiere notificarlo previamente a través del correo casaldones@reus.cat.

 

  • Círculo de Mujeres - Tsunamis García

Vinculada tanto a la Asociación de Mujeres Latinoamericanas  Madre Tierra de Reus, como al Círculo de Mujeres (organización creada de forma espontánea), la coach transformacional y terapeuta hipnóloga, Tsunamis García, explica que es importante «compartir la diversidad entre culturas», y es aún más fundamental «generar una unión entre mujeres». 


Y es que «unirse es una forma de conocer las necesidades de unas y otras para ayudarnos de forma colaborativa», destaca. Defiende que cada personas tiene una red de contactos útil, «quién sabe si, explicando que tienes una necesidad encuentres a alguien que conozca otra persona que te pueda ayudar», completa. El Círculo de Mujeres, por otro lado y antes de la llegada de la pandemia, permitía el encuentro de un grupo de mujeres una vez cada 15 días. «Éramos casi una treintena y empezamos a reunirnos a finales de 2019», recuerda.


García, entre otras iniciativas, presentó, hará un par de años, uno de sus libros –Rompiendo cadenas– en el Casal de les Dones y se muestra bastante vinculada. Expresa que es vital que exista un espacio como tal. «Allí se da apoyo, ayuda y orientación a las mujeres, aunque hace falta hacerlo aun más visible, trabajar en la tolerancia y la equidad de género», concluye. 

 

  • Associació de Dones Ganxetes -Glòria M. Arnavat

Las mujeres de la Associació de Dones Ganxetes, además de realizar actividades presenciales (al menos antes de la llegada de la Covid-19) en el Centre d’Amics de Reus, acudieron «desde el primer día» al Casal de les Dones,  «en su ubicación inicial, en un primer piso de la calle Santa Teresa», recuerda la presidenta de la asociación, Glòria M. Arnavat. 

«Reunirse con otras mujeres anima mucho, crea un vínculo. De nuestra entidad, muchas viven solas y, al llegar la pandemia, no hemos querido perder el contacto. Algunas hemos aprendido a videollamarnos y hemos participado en actividades a distancia», detalla. Las Dones Ganxetes han participado en diferentes iniciativas del Casal de les Dones, así como en fechas señaladas (el Día Internacional de la Mujer) y, especialmente, «nos gusta asistir cuando hay alguna exposición, como la que hay ahora en el Casal por sus 15 años», dice. 


Destaca, sobre todo, la implicación de la por aquel entonces concejala de Polítiques per a la Igualtat, Mª Teresa Vallverdú, durante el mandato de 2003 a 2007. «Fue un momento importante para las mujeres. En el Casal hay entidades diferentes y profesionales a los que podemos acudir, tanto a nivel psicológico como jurídico», dice refiriéndose al Servei d’Informació i Atenció a les Dones (SIAD). 

 

  • AA.MM. Latinoamericanas Madre Tierra -Fátima Peña 
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Asociación de Mujeres Latinoamericanas Madre Tierra es otra agrupación que observó la evolución del equipamiento municipal. «Siempre hemos dicho que hacen falta espacios de empatía, para dialogar con otras personas», manifiesta desde la asociación Fátima Peña. Además añade que, «mucha gente, no sabe qué es el Casal de les Dones y hay que hablarlo, compartir impresiones». Puntualiza, también, lo crucial que es que te orienten. «En el SIAD lo hacen  y para mí, lo hacen de 10», dice.

«En nuestra asociación escuchamos las historias de otras mujeres y las ayudamos. La inmigración se produce por diferentes causas (económicas, familiares o por estudios) y tener un círculo de personas que ha pasado por lo mismo, ayuda a desahogarte», expresa. 

Hay situaciones tan duras, añade, «que no se cuentan a la familia, te las guardas para tí, y hace falta sacarlo todo». La entidad a la que pertenece Peña, además, acogía actividades en las que se divulgaba la cultura latinoamericana, ya fuera a través de la gastronomía como con la proyección de documentales. «Hubo una actividad llamada ‘sopas del mundo’ donde los diferentes miembros cocinaron sopas típicas suyas, un excusa para conocer las demás costumbres e implicarse los unos con los otros», apunta.

  • Asociación de Mujeres Blanca Almendro - Ana García Pachón
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as integrantes de la Asociación de Mujeres Blanca Almendro, con sede en el barrio Gaudí, se reunían siempre para pasar un buen rato mientras aprendían, ya fuera con actividades de baile como con talleres de manualidades, punto y cocina. Incluso hacían excursiones culturales y de ocio. Lamentablemente, la agenda ha tenido que pararse obligatoriamente. 


«Antes de la aparición del Casal de les Dones, íbamos un poco perdidas. Éramos (y somos) personas activas y queríamos reunirnos y desempeñar iniciativas. Al aparecer un espacio para hacer todo eso, supuso toda una oportunidad. En poco tiempo, fuimos tantas que el lugar quedó pequeño. Por suerte, el Casal se trasladó a un lugar más grande», apunta la presidenta de la Asociación de Mujeres Blanca Almendro, Ana García Pachón.

Una de las máximas que defiende también García Pachón es animar a aquellas mujeres que no se atreven, tal vez, a acudir a la asociación a que lo hagan. «Juntas aprendemos conociéndonos y compartiendo. De hecho, cuando empezamos, había una señora que sabía coser muy bien y nos enseñó a todas. Cada una enseña lo que sabe hacer mejor», justifica. Después de sus más de 25 años, la Asociación de Mujeres Blanca Almendro, «se ha convertido en una gran familia», describe.

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