Reus quiere incorporar contenedores inteligentes para mejorar el reciclaje

La ciudadanía necesitaría de una tarjeta personal para tirar la basura. El Ayuntamiento ha presentado el proyecto a los Fondos FEDER para conseguir cofinanciamiento

11 mayo 2020 12:26 | Actualizado a 18 mayo 2020 06:37
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Con el fin de mejorar las cifras de reciclaje y alcanzar las metas europeas, el Ayuntamiento de Reus plantea implantar un nuevo sistema de recogida de residuos basado en las nuevas tecnologías. Por un lado, la intención es instalar contenedores inteligentes que funcionen a través de una tarjeta individual de identificación y, por otro, sustituir los actuales contenedores soterrados del centro de la ciudad por islas emergentes, «como una especie de pequeñas deixalleries móviles», ha aclarado en rueda de prensa el concejal de Medi Ambient, Daniel Rubio.

De momento, el Ayuntamiento ha presentado el proyecto a la Unión Europea, a través del programa FEDER de Catalunya con la intención de conseguir el cofinanciamiento europeo del 50%. Según ha detallado Rubio, el presupuesto es de 2.282.075,46 euros y, en el caso que dispongan de ayuda europea, Reus dispondría de dos años para implantar el proyecto. «Contemplamos que el sistema de identificación con tarjeta llegue a toda la ciudad. Pero no se hará de golpe, sino que se harían previamente algunas pruebas piloto puntuales y se iría desplegando», ha explicado el concejal.

En el caso concreto del sistema de identificación de usuarios de los contenedores, se realizaría a través de tarjetas personales y únicamente en los contenedores de la fracción orgánica y rechazo. «Serían contenedores cerrados que se abrirían a través de una tarjeta que permitirá reconocer al usuario», detallaba. El sistema iría también acompañado de una línea de bonificaciones para que «quien mejor recicle, menos impuestos de la basura pague», dijo Daniel Rubio. De esta forma, se busca incentivar a la ciudadanía a reciclar mejor.

La segunda medida será eliminar los contenedores soterrados del núcleo antiguo y sustituirlos por islas de contenedores emergentes. El sistema funcionaría como deixalleries móviles de pequeño formato y «permitirá hacer llegar todas las fracciones a aquellos puntos de la ciudad que por la configuración del espacio urbano imposibilita instalar baterías de contenedores», remarcó el concejal de Medi Ambient.

Mejora del 1,42%

Estas nuevas medidas se desplegarán con la finalidad de alcanzar las metas europeas: en 2025 se tiene que reciclar el 50% de los residuos generados y en 2035, esta cifra ya tendría que ser del 65%.

La ciudad todavía está lejos, aunque desde la concejalía de Medi Ambient se destaca que el índice de recogida selectiva tiene una tendencia ascendente. Este 2020, por ejemplo, la ciudad ha incrementado 1,42 puntos respecto el año pasado, y la mejora es del 3,18% si se compara con 2018. «Son cifras optimistas», valora Daniel Rubio. Con las cifras del primer cuatrimestre del año, la recogida selectiva representa un 23,46% del total de residuos depositados en los contenedores (no se incluyen las deixalleries). En 2019, el índice fue de un 22,04% y en 2018, del 20,28. Por fracciones, el rechazo ha bajado un 1,26% durante estos primeros cuatro meses del año. En el caso del papel y cartón, la recogida ha aumentado un 7,18%, los envases lo hacen en un 26,23%, la materia orgánica un 6,25% y el vidrio un 15,96%. 

Esta semana se realizará una campaña de concienciación para mejorar aún más la recogida a través de vídeos informativos.

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