Los malos olores que todas las noches impregnaban las calles del barrio Sol i Vista habrían llegado a su fin. Y todo gracias a la gran movilización de los últimos días por parte de los vecinos, que han hecho llegar numerosas quejas tanto al Ayuntamiento como a la Guàrdia Urbana.
El último episodio tuvo lugar este miércoles. Según explicaba ayer la presidenta de la asociación de vecinos, Ana Belén Castaño, sobre las seis y media de la tarde el mal olor y el humo regresaban de nuevo al barrio. Fue entonces cuando ella y otros vecinos alertaron a la Guàrdia Urbana.
Una patrulla policial y los Bombers de la Generalitat se personaron en una finca situada a escasos metros del barrio, en el Camí de l’Institut Pere MataSegún confirmaban fuentes municipales consultadas, una patrulla policial y los Bombers de la Generalitat se personaron en una finca situada a escasos metros del barrio, en el Camí de l’Institut Pere Mata, desde donde procedía el mal olor. Allí comprobaron que seguía la quema incontrolada de vegetación mezclada con plásticos y otros productos, que podrían ser gomas o incluso restos de neumáticos. Tras la actuación de la unidad de los bomberos, el responsable de la masía se comprometió a cesar la actividad por las molestias que estaba ocasionando a los residentes de la zona.
Un expediente abierto
No es la primera ocasión en la que los agentes de la Guàrdia Urbana actúan en torno a este caso. Al parecer, ya han levantado varias actas y han abierto un expediente contra el responsable de la quema incontrolada. La masía, situada en los alrededores del Institut Pere Mata, está provista de pozos en los que se llevaría a cabo la quema de residuos. De momento, el expediente está en manos del área de Medi Ambient del Ayuntamiento de Reus que se encargará de estudiar el caso y tomar una determinación al respecto antes de actuar.
«Una nube tóxica»
El Diari recogía esta misma semana las quejas de los vecinos de Sol i Vista, los cuales denunciaban que todas las noches aparecía «una nube tóxica» que hacía imposible salir a la calle o tener las ventanas de casa abiertas. Una de las zonas que se han visto más afectada son las viviendas ubicadas en la avenida de Falset y alrededores. Allí sus vecinos describían el fuerte olor «como si se estuvieran quemando productos químicos» y se preguntaban si su inhalación sería perjudicial para la salud.
En este sentido, la presidenta de la asociación de vecinos aseguraba que eran muchos los residentes en Sol i Vista que habían contactado con ella durante los últimos días para quejarse del desagradable olor que tenían que soportar a diario. Asimismo se lo había comunicado tanto al consistorio como a la Guàrdia Urbana.