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Tras más de una década en la que la construcción de viviendas se paralizó completamente, el sector empieza, ahora, a remontar. En Tarragona, ya hace uno años que se ven nuevas promociones, una tendencia que ahora empieza a notarse también en Reus. En los últimos meses, se han ido conociendo distintos proyectos, con los que se alzarán más de 450 viviendas, entre la promoción que se está levantando en la avenida Onze de Setembre (entre Mercadona y la escuela Joan Rebull), la prevista en los terrenos de lo que era la antigua fábrica La Coromina Industrial (en el entorno del centro cívico Ponent) y en la zona conocida como Forn del Soto, donde había la antigua fábrica de jabones de Mas Magrané. No obstante, cabe destacar que se tratan de proyectos a largo plazo, que se irán ejecutando en distintas fases y, por lo tanto, los 450 pisos se levantarán en los próximos años.
En concreto, en la avenida Onze de Setembre, la inmobiliaria Unifamiliar Sant Jordi ya está construyendo 32 viviendas, lo que será la primera de un total de cinco fases que se irán ejecutando «en base de la solidez demográfica de la ciudad», explicaba al Diari el gerente de la inmobiliaria y representante de la Agrupació Provincial de Promotors de Tarragona, Daniel Roig, el pasado mes de mayo, cuando el proyecto constructivo empezaba a ejecutarse. Cuando se hayan realizado las cinco fases, esta zona de Reus habrá crecido con un total de 160 viviendas nuevas, con pisos de entre cuatro y cinco habitaciones.
Un segundo macro proyecto urbanístico es el previsto en el espacio que ocupaba la antigua fábrica de jabones de Mas Magrané, ubicada en el conocido como Forn del Soto, entre las calles del Roser y el Camí de Valls. En este caso, se proyecta una promoción inmobiliaria con un centenar de pisos.
La tercera promoción es la prevista en el solar que ocupaba la antigua fábrica La Coromina Industrial, en la manzana que forman las calles Pau Font de Rubinat, Roger de Belfort, Camí de Riudoms y la avenida Països Catalans. El derribo de las naves ha finalizado recientemente, tras más de medio año trabajando. Así, la primera fase del proyecto, a cargo de la empresa Tarracosol S.L., ya está finalizada.
Ahora, los siguientes pasos serán urbanizar toda la pastilla urbanística y levantar cuatro bloques de viviendas. Además, se abrirán dos calles que dividirán en tres la actual manzana. Por un lado, se terminará de abrir la calle Frida Kahlo, que unirá el Camí de Riudoms con Pau Font de Rubinat. También se procederá a crear un nuevo vial, que conectará Frida Kahlo con la avenida Països Catalans. Tarracosol S.L. actuará en una superficie total de unos 20.000 metros cuadrados, de los cuales, cerca de 6.000 estarán destinados a una gran zona verde. En cuanto a los viales, representarán unos 5.000 metros cuadrados.
Buenas expectativas
La creación de nuevas viviendas en Reus es a largo plazo. En este sentido, los primeros pisos en finalizar serán los de la promoción de 32 viviendas que la inmobiliaria Unifamiliar Sant Jordi ya está ejecutando en la avenida Onze de Setembre. La previsión es que lo trabajos finalicen en, aproximadamente, un año y medio.
En cuanto a los otros dos proyectos (el del entorno del centro cívico Ponent y Mas Magrané) aún no han empezado a levantarse los edificios, aunque ya se han hecho los derribos previos, por lo que son proyectos más a largo plazo. Aun así, los primeros movimientos ya han levantado expectativas entre vecinos y comerciantes. «Creo que será muy positivo para la ciudad. Ayudará a revitalizar la zona», opina Mercè Mestres, desde la farmacia ubicada en el Camí de Riudoms, justo delante del solar que hasta hace pocos días ocupaba la antigua fábrica Coromina. Así también lo cree Cinta Albesa, vecina de la zona, que considera que es «necesario para el barrio». «Son unos terrenos que estaban muy abandonados y con malas condiciones. Así, se pondrá orden y habrá más oferta de vivienda», añade Albesa.
Por otro lado, Isabel Creus, de Ortopèdia Sant Joan, valora el hecho que el proyecto permita abrir dos nuevas calles. «Ayudará a descongestionar el tráfico, porque es una zona por la que circulan muchos vehículos en horas punta», destaca. En cuanta a posibles repercusiones económicas, Cisco Villalba opina, desde el estanco que hay en el Camí de Riudoms, que «puede ser positivo para los negocios de la zona. Entiendo que, como más gente, mejor». Óscar Gras es otro vecino y, en su caso, se pregunta si es necesario construir tantos pisos. «Quizás sí que faltan viviendas, aunque quizás se tendrían que potenciar las zonas verdes», opina.
Bloque de pisos en el Carrilet
Otro proyecto urbanístico que se plantea en la ciudad es la construcción de un bloque de viviendas en el Mercat del Carrilet, lo que se enmarcaría en la reforma del mercado y también todo su entorno.
«El Mercat del Carrilet ha perdido fuelle y su entorno más inmediato no funciona. El proyecto residencial pretende crear una nueva centralidad», expresaba a principios de año el entonces concejal de Urbanisme, Marc Arza. En este caso, aún no hay concreciones, pero el bloque podría alcanzar las once plantas.
