Tributo Héroes del Silencio. 'La Avalancha no envejece'

Reus rindió tributo a Héroes del Silencio con Derivas, la banda que, por momentos, transmite una leyenda eterna. Se cumplen 20 años del último disco del grupo zaragozano

19 mayo 2017 23:05 | Actualizado a 22 mayo 2017 21:20
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Litus me picó el sábado y le costó 30 segundos convencerme. «Oye, Derivas están esta noche en la Tomán de Reus. Hay tributo a los 20 años de Avalancha». Rápido me di cuenta de que andaba corto de merchandising. Costó encontrar una camiseta de Héroes ideal para la noche. Desde aquel día en La Cartuja de Sevilla, en octubre de 2007, ha llovido. Y el armario hay que ir actualizándolo más a menudo. En Sevilla me acompañó mi colega Litus. También Cristian, otro fiel, aunque el más exigente con el grupo. El sábadop pillé el móvil y le trasladé la noticia en tono obligación. Decidió anular parte de su agenda. «Lo primero es la primero».
Los Héroes consiguen hasta que en nuestras largas charlas pre-concierto me guste especialmente la cerveza. Huyo de ella el resto del año. El tridente nos encontramos un ratazo antes en un bar especialista en tapas cerca de la Tomán. En pleno homenaje gastronómico, Litus soltó un «ostia, el cantante de Derivas». La banda cenaba en el mismo lugar que nosotros. Diego Moreno es la voz de los Derivas. No sólo eso. El personaje de Bunbury lo explota hasta las últimas consecuencias.  Los mismos gestos, la misma pose, parecida voz. Compartió cerveza y anécdotas con tres locos cambrilenses. Con detallazo incluido; una púa de guitarra para Litus. 
A Litus ese encuentro le recordó al que tuvo en 2007 en Zaragoza con Gonzalo Valdivia, hermano del ‘maestro’ Juan. Gonzalo acompañó a los Héroes en su última gira de 10 conciertos como segundo guitarrista. En la mañana del show en el estadio de La Romareda, los dos personajes (Litus en mayor escala) cruzaron sus caminos en un bar a la hora del almuerzo. A Gonzalo le salió la ronda gratis a cambio de simpatía y la firma de un libro.
Mientras, Diego, Rafa Cirio, Alberto Nuñez, Ricard Fernández y Zuri no pertenecen al movimiento aragonés. Estos barceloneses han convertido su tributo a Héroes del Silencio en un concierto de culto. Con Derivas ha compartido escenario el mismo Pedro Andreu, batería protagonista de una historia sin muerte.
Porque los Héroes nunca se fueron. Ni siquiera en el 20 aniversario de su último disco con material nuevo, sus fans se rinden ante un posible reencuentro. En 1995, Avalancha trajo nuevas emociones y algunos himnos. También significó la despedida en activo tras una gira interminable. El buque nunca paraba. 
Derivas repasó ese viaje con mucha dignidad. ‘Rueda Fortuna’ se encargó de dejar claro que ‘Avalancha’ fue un disco duro, quizás el más crudo de los Héroes. «La experiencia es la evidencia, y las cuestiones mi fortaleza», reza un tema con adrenalina pura para cualquier cuerpo con ganas de jaleo. 
Diego emuló a Bunbury con sus movimientos de Ave Rapaz en ‘Deshacer el Mundo’ y de boxeador en ‘Iberia Sumergida’. Con la familia de Héroes ya entregada en la platea. La afirmación al ya mítico «¿Están preparados para la Avalancha?», desató euforia antes de la paz. ‘La chispa adecuada’ puso cabellos de punta y derrochó alguna lagrimilla. Himno eterno. El atrevimiento de Derivas alcanzó su cúspide con ‘La espuma de Venus’, un tema delicioso y valorado por los fans, pero poco conocido. «Nadé desnudo tu oleaje»,  acentúa esa obra. También caló el estribillo desafiante de «Para siempre, me parece mucho tiempo».
La despedida de Avalancha abrió espacio para que apareciera El Duende. También ‘Entre Dos Tierras’. Evidentemente se desbocó la sala. Porque la esencia de Héroes late. Sigue viva. Ni siquiera tras 20 años, la Avalancha envejece.
Litus me picó el sábado y le costó 30 segundos convencerme. «Oye, Derivas están esta noche en la Tomán de Reus. Hay tributo a los 20 años de Avalancha». Rápido me di cuenta de que andaba corto de merchandising. Costó encontrar una camiseta de Héroes ideal para la noche. Desde aquel día en La Cartuja de Sevilla, en octubre de 2007, ha llovido. Y el armario hay que ir actualizándolo más a menudo. En Sevilla me acompañó mi colega Litus. También Cristian, otro fiel, aunque el más exigente con el grupo. El sábado pillé el móvil y le trasladé la noticia en tono obligación. Decidió anular parte de su agenda. «Lo primero es la primero».

Los Héroes consiguen hasta que en nuestras largas charlas pre-concierto me guste especialmente la cerveza. Huyo de ella el resto del año. El tridente nos encontramos un ratazo antes en un bar especialista en tapas cerca de la Tomán. En pleno homenaje gastronómico, Litus soltó un «ostia, el cantante de Derivas». La banda cenaba en el mismo lugar que nosotros. Diego Moreno es la voz de los Derivas. No sólo eso. El personaje de Bunbury lo explota hasta las últimas consecuencias.  Los mismos gestos, la misma pose, parecida voz. Compartió cerveza y anécdotas con tres locos cambrilenses. Con detallazo incluido; una púa de guitarra para Litus. 

A Litus ese encuentro le recordó al que tuvo en 2007 en Zaragoza con Gonzalo Valdivia, hermano del ‘maestro’ Juan. Gonzalo acompañó a los Héroes en su última gira de 10 conciertos como segundo guitarrista. En la mañana del show en el estadio de La Romareda, los dos personajes (Litus en mayor escala) cruzaron sus caminos en un bar a la hora del almuerzo. Al Alquimista le salió la ronda gratis a cambio de simpatía y la firma de un libro.

Mientras, Diego, Rafa Cirio, Alberto Nuñez, Ricard Fernández y Zuri no pertenecen al movimiento aragonés. Estos barceloneses han convertido su tributo a Héroes del Silencio en un concierto de culto. Con Derivas ha compartido escenario el mismo Pedro Andreu, batería protagonista de una historia sin muerte.

Porque los Héroes nunca se fueron. Ni siquiera en el 20 aniversario de su último disco con material nuevo, sus fans se rinden ante un posible reencuentro. En 1995, Avalancha trajo nuevas emociones y algunos himnos. También significó la despedida en activo tras una gira interminable. El buque nunca paraba. 

Derivas repasó ese viaje con mucha dignidad. ‘Rueda Fortuna’ se encargó de dejar claro que ‘Avalancha’ fue un disco duro, quizás el más crudo de los Héroes. «La experiencia es la evidencia, y las cuestiones mi fortaleza», reza un tema con adrenalina pura para cualquier cuerpo con ganas de jaleo. 

Diego emuló a Bunbury con sus movimientos de Ave Rapaz en ‘Deshacer el Mundo’ y de boxeador en ‘Iberia Sumergida’. Con la familia de Héroes ya entregada en la platea. La afirmación al ya mítico «¿Están preparados para la Avalancha?», desató euforia antes de la paz. ‘La chispa adecuada’ puso cabellos de punta y derramó alguna lagrimilla. Himno eterno. El atrevimiento de Derivas alcanzó su cúspide con 'La espuma de Venus’, un tema delicioso y valorado por los fans, pero poco conocido. «Nadé desnudo tu oleaje»,  acentúa esa obra. También caló el estribillo desafiante de «Para siempre, me parece mucho tiempo».

La despedida de Avalancha abrió espacio para que apareciera El Duende. También ‘Entre Dos Tierras’. Evidentemente se desbocó la sala. Porque la esencia de Héroes late. Sigue viva. Ni siquiera tras 20 años, la Avalancha envejece.

 

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