Un mosso salva la vida de un bañista en la piscina de Castellvell

El agente, fuera de servicio evitó que un hombre falleciera ahogado en la piscina del pueblo del Baix Camp

19 septiembre 2019 19:10 | Actualizado a 20 septiembre 2019 08:15
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

El verano de 2019 quedará para siempre en la memoria de Álvaro y de la persona a quien salvó la vida. La rápida actuación y conocimiento en maniobras de reanimación del primero, Mossos d’Esquadra, hizo que el bañista no falleciera ahogado en la piscina. Un final feliz que, semanas después, el agente sigue recordando emocionado y con gran satisfacción personal como «la mejor actuación que he hecho: salvar la vida de una persona».

La historia se remontan al pasado 10 de agosto. Ese día, Álvaro se encontraba disfrutando de un día en familia junto con sus hijos en la piscina municipal de Castellvell del Camp. De hecho, este caporal de los Mossos del Àrea Regional de Recursos Operatius (ARRO) del Camp de Tarragona, suele veranear en este pueblo por su proximidad con Reus. Mientras estaba fuera de la piscina, en la zona donde se encontraban las toallas, escuchó el grito de una mujer pidiendo ayuda.

Sin pensárselo ni un segundo saltó al agua. La mujer trataba de sostener a un hombre, de unos 60 años de edad, que estaba inconsciente y con toda la cabeza sumergida. Rápidamente cogió el cuerpo y lo sacó del agua con la ayuda del socorrista que estaba fuera de la piscina. Álvaro recuerda que el ahogado yacía en el suelo con la cara y los labios morados. Lo primero que hizo fue abrirle la boca, extraerle la lengua, y empezar con la maniobra de reanimación pulmonar. Mientras tanto, el socorrista había ido a por el DEA (Desfibrilador Externo Automático).

Por suerte no fue necesario utilizarlo. Y es que, justo al principio, el hombre empezó a expulsar agua por la boca. «Acto seguido lo que hice fue estirarlo en la posición lateral de seguridad para que pudiera seguir sacando agua y empezara a respirar. Pasados tres o cuatro minutos comenzó a recuperar la conciencia».

Durante toda su actuación, el agente de los Mossos explica que el resto de bañistas también se implicaron desde el inicio trayendo toallas o ayudándole a tomar las pulsaciones. Además, también instalaron una sombrilla para que el hombre no estuviera expuesto al sol.

El reencuentro

Las ambulancias del SEM llegaron en aquel preciso momento para hacerse cargo de la situación. Tras asegurarse de que el hombre estaba estable, los sanitarios le trasladaron de urgencia al Hospital Sant Joan de Reus donde quedó ingresado. Álvaro reconoce que estuvo tan concentrado en todo momento que no tomó conciencia real de lo ocurrido hasta que empezaron a felicitarle. Sobre todo por su valentía, destreza y rápida actuación. Unos reconocimientos que agradece por un rescate exitoso – el primero que realizaba– gracias a la formación recibida como agente. Por ejemplo, por el hecho de tener interiorizado que en este tipo de casos «los primeros instantes son vitales para salvar la vida a la persona. Por eso hay que actuar con rapidez».

Otro de los momentos inolvidables de toda esta historia para Álvaro fue cuando visitó al hombre en el hospital. Un encuentro que define como «especial» y que no fue el único, ya que pasadas unas semanas siguen manteniendo contacto en lo que, sin duda, podría definirse como el principio de una amistad única.

Comentarios
Multimedia Diari