Un total de 18 casos de coronavirus en Villablanca

Se trata de cinco usuarios y 13 empleados de la empresa que presta servicios en la atención a las personas con discapacidad del Grupo Pere Mata

03 abril 2020 10:01 | Actualizado a 07 abril 2020 08:16
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Villablanca –que reúne el conjunto del área de atención a la discapacidad del Grupo Pere Mata- ha confirmado 18 casos de COVID-19, entre usuarios y empleados. En el caso de usuarios, se trata de un total de cinco personas afectadas. Según detalla la empresa, los cinco usuarios positivos están aislados en unidades de la Residència el Bosc desde que dieron los primeros síntomas. También se encuentran aisladas otras personas con sintomatología leve “de baja sospecha clínica que podrían estar también afectados por la infección”, detallan fuentes consultadas.

El servicio médico de Villablanca está haciendo el seguimiento de las personas aisladas. Un personal que, según remarca la empresa, dispone de todas las medidas de protección personal recomendadas por Generalitat. En el caso que el estado de salud de los usuarios afectados se agravara, Villablanca ya está coordinado con el Hospital Sant Joan de Reus por si fuese necesario el traslado al centro hospitalario. “Los profesionales informan puntualmente a las familias del desarrollo del estado de salud de las personas aisladas”, se remarca desde la empresa.

En cuanto a los profesionales, los que están bajo sospecha clínica -estén pendientes o no de la prueba del COVID-19- están aislados en sus casas. En este caso hay 13 positivos confirmados. Desde Villablanca se explica que se han realizado más de un centenar de pruebas a los profesionales relacionados con la unidad afectada o con sintomatología. El objetivo es detectar positivos asintomáticos para poder evitar nuevos contagios.

Desde el Comité de Empresa Villablanca Serveis Assistencials se recuerda que “ya veníamos advirtiendo de esta situación de precariedad en los sectores de la sanidad y la atención a personas dependientes”, lo que se traduce, según el Comité, a “una falta de previsiones de riesgos laborales”, además de “no tenerse en cuenta la evaluación de riesgos psicosociales”. Aun así, se señala que “este no es el momento de las recriminaciones o las demandas” y que, a pesar de que ante la crisis del coronavirus los empleados consideran que inicialmente no se actuó con rapidez, se destaca que actualmente disponen de todo el material de protección personal.

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