Una cincuentena de coches abandonados son llevados al depósito municipal cada año en Reus

Un vehículo Volkswagen lleva varios meses abandonado en la zona de estacionamiento ubicada en la avenida Zaragoza número 20, en el barrio Gaudí de Reus. El problema no es que ocupe una plaza, sino el vandalismo que se genera a su alrededor. Así lo han asegurado los vecinos de la zona que explican que, ahora, hay un indigente que duerme en el coche.

«Ya hace semanas que por las noches viene un hombre y utiliza el vehículo como su casa pero nunca está durante el día», asegura Gloria, una joven del barrio, que explica que se trata de un «indigente que retira los avisos de la policía diariamente». De hecho, el vehículo tiene una ventana forzada y los asientos traseros reclinados y en el interior quedan residuos de cervezas y bocadillos que podrían pertenecer a este inquilino. «Este coche, o lo que queda de él, era el foco de reuniones de jóvenes que montaban fiestas dentro», añade José, un hombre que suele aparcar en este mismo solar para ir a correr y que explica que antes, «cuando caía la noche, me encontraba siempre un grupo que se reunía, bebía, fumaba y ponía música a todo trapo sin respeto alguno para los demás».

Algunos vecinos del barrio muestran preocupación ante el suceso. «Como el incivismo vaya a más, y se prenda fuego, el peligro será general, porque aquí por la noche suelen aparcar una cuarentena de vehículos», denunció A.Fernández a través de las redes sociales, añadiendo que ha avisado varias veces a la Guàrdia Urbana para que lo retiren.

Otros, en cambio, están habituados a esta dinámica. Así lo explica Gloria, que señala un coche un par de plazas más allá, indicando que «con toda probabilidad este también es un coche abandonado y cuando no quede nada del Volkswagen, será el nuevo techo para alguien».

En diez meses, se han hecho 306 actas de denuncias por abandono. Estas se inician 72 horas después de que un vehículo con pegatina no haya sido retirado

En ese aspecto, Gloria indica que el abandono de coches en la zona es «de los más recurrente» y señala que «yo vivo delante y me siento segura; no me molesta mientras no genere incivismo y accidentes, pero es verdad que tengo parking privado».

Según la Ordenanza de Circulación, la retirada de vehículos al deposito municipal se produce cuando estos están en la vía pública durante un período de tiempo largo y en condiciones necesarias para suponer, «de forma racional y fundamentada» que ha sido abandonado.

Más denuncias que en 2019

Reus tiene una media de 50 vehículos llevados al depósito municipal por abandono al año. En lo que llevamos de 2020, se han puesto 526 pegatinas de abandono (en 2019 fueron 986) y se han abierto 603 actos de denuncia después de hacer el seguimiento (superando con una cuarentena las cifras de 2020). Durante los diez primeros meses del año, ya se han retirado 47 vehículos abandonados al depósito municipal, una cifra muy cercana al cierre del 2019, que se situó en 55.

La normativa, en caso de detectar un vehículo que haga pensar que puede haber sido abandonado, la Guàrdia Urbana de Reus coloca un adhesivo para que el propietario lo retire. Si pasan 72 horas y el coche sigue aparcado en el mismo lugar, se levanta acta de abandono, lo que puede suponer una multa de hasta 200 euros. El vehículo es llevado al depósito municipal ubicado en el polígono AgroReus y si nadie lo reclama queda adjudicado al Ayuntamiento. Pasado un plazo, se procede al desguace, por lo que se desmonta por piezas para poder colocar en el mercado por separado. En ningún caso, el consistorio puede vender el coche entero.