Una mujer se encuentra con su piso okupado y lo recupera en 48 horas

Los 'inquilinos' le dijeron que una tercera persona les había alquilado la vivienda. La propietaria presentó la denuncia, se celebró un juicio rápido y recuperó su hogar la misma semana

05 junio 2017 14:58 | Actualizado a 14 noviembre 2017 13:34
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Rocambolesca es la historia que ha vivido una ciudadana de Reus en las últimas semanas. Estuvo unos días fuera por motivos de trabajo, y al llegar a casa ya no pudo entrar. La habían okupado. La primera sospecha de que ocurría algo raro la tuvo su padre cuando, sabiendo que su hija no estaba, pasó por la calle y vio a una persona desconocida en la terraza del piso, ubicado en las inmediaciones del Passeig Prim. En seguida la llamó. Le preguntó si había dejado las llaves a alguien. Pero no lo había hecho.

De este modo empezó un ajetreado periplo judicial. Intenso pero breve. Por suerte, en 48 horas terminó todo. «Mucha gente cree que la justicia siempre va lenta. Pero en este caso, la única queja que tenemos es de los okupas. Ni de los Mossos d’Esquadra ni de la justicia, porque la solución fue muy rápida», apunta la familia afectada.

Todo ocurrió hace un par de semanas. La propietaria, al saber que había alguien en el interior de su piso, se presentó allí y trató de hablar con los ‘inquilinos’ para pedirles que se marcharan de su casa. Había tres adultos y dos menores. Le dijeron que estaban de alquiler, y que habían hecho las gestiones con otra persona. Afirmaron que habían pagado por ello unos 750 euros. Al supuesto intermediario, la propietaria nunca lo llegó a ver. 

Cuando pudo regresar a su hogar, se lo encontró prácticamente vacío. Se llevaron, sobre todo, ropa. También pequeños objetos como herramientas, distintos utensilios o cámaras fotográficas

Los okupas le dijeron que se irían. Pero no lo hicieron. Así que la dueña del piso puso la denuncia y a partir de aquí todo fue muy deprisa. Habían forzado la puerta, cogido las llaves de su interior y se habían instalado. Ella lo denunció el martes, el miércoles la citaron a declarar, el jueves se celebró un juicio rápido y allí mismo el juez decretó el desalojo inmediato del piso. El mismo día a las cinco de la tarde se personaron en la vivienda agentes de los Mossos d’Esquadra para comprobar que estuviera desalojada. Los okupas, aunque en el juicio habían mostrado su disconformidad, ya no estaban allí. Y ella pudo regresar a casa.

La propietaria, cuando al fin pudo regresar a su hogar, se lo encontró prácticamente vacío. Se llevaron, sobre todo, ropa. De vestir, sábanas o mantas. Prácticamente no quedaba nada. También echó en falta pequeños objetos como herramientas, distintos utensilios o cámaras fotográficas. El televisor seguía allí. Y los muebles. Pero los okupas se deshicieron de toda la documentación que encontraron y que pertenecía a la propietaria.

La dueña del piso amplió la demanda porque más allá de la okupación, había sido víctima de robo. En este caso, la justicia sigue su curso. El sistema, en este caso, parece que ha funcionado. Aunque es otro de los miles de casos de okupaciones ilegales, una práctica cada vez más presente en la demarcación.


¿Cómo echarlos legalmente?

  • Ir a la policía y denunciar. En el instante en que descubre que el piso ha sido ocupado, avise a la policía y ponga una denuncia ante el Juzgado de Guardia o en la Comisaría. i puede demostrar que es el el dueño de la casa tiene derecho a recuperarla.
  • Una situación breve. Si la ocupación es reciente, la policía puede actuar y echarles. Si no, debe haber una resolución judicial.
  • Litigio judicial. Un proceso que puede alargarse meses o incluso años. Aunque en algunos casos logra solucionarse en apenas unas horas.

 

Comentarios
Multimedia Diari