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Más de cuarenta agentes han participado, la mañana de este lunes 4 de junio, en una macrooperación policial conjunta para acabar con el fraude de luz y agua en Reus. Guàrdia Urbana y Mossos d'Esquadra se unido para proteger a los técnicos de las empresas de suministros que, por miedo, no se atrevían a acabar con los 'pinchazos' realizados en varias casas okupadas de la ciudad.
Han sido alrededor de sesenta los domicilios a los que la compañía ha desconectado los cables con los que se abastecían de electricidad sin pagarla. Si hace una semana, la policía local de Reus actuaba en el Carrer Monestir de Ripoll y el Carrer Muralla, esta vez lo ha hecho —acompañados por el cuerpo de seguridad autonómico— en cuatro calles de la zona de les Verges, vías perpendiculares al Carrer de Mas Abelló, en el antiguo barrio Sant Josep Obrer.
Media decena de furgonetas del ARRO y varios coches patrulla de Guàrdia Urbana y Mossos d'Esquadra han llegado al punto alrededor de las nueve y cuarto de la mañana. Diez minutos más tarde lo han hecho los técnicos de la luz y un par de horas después, los de Aigües de Reus, que solamente han localizado a tres vecinos con el agua 'pinchada'.
Sin incidentes, los trabajadores de las compañías, bajo la seguridad de los agentes, han acabado, uno por uno, con los cables que 'robaban' los suministros. Se trata de una operación que pretende acabar con los abusos de las okupaciones y que, des del cuerpo de seguridad municipal, llevan a cabo desde hará poco menos de un año.
