Varias promotoras muestran interés para construir en el solar de la antigua Sedera

Ha pasado más de un año desde que la antigua fábrica de la Sedera de Reus, en el paseo de Misericòrdia, fue derruida dejando paso a un enorme solar.

Desde entonces se ha especulado bastante sobre qué uso se le podía dar a este descampado desértico.

El Ayuntamiento de Reus, a través de su concejalía de Urbanisme, se comprometió a sondear al tejido vecinal para ver si aceptaba la idea de convertir el espacio, provisionalmente, en una zona verde o un aparcamiento.

A día de hoy, el consistorio ha descartado cualquiera de estas dos opciones.

Finalmente apostó por instar a la propietaria del terreno, la inmobiliaria Solvia, a que vallase el espacio y lo mantuviese limpio y en condiciones.

El concejal de Urbanisme del Ayuntamiento de Reus, Marc Arza, explica que «descartamos el aparcamiento o la zona verde por dos motivos. Por un lado porque los vecinos nos aseguraron que no eran necesidades urgentes. Además, en los últimos meses ha habido algunos movimientos y diferentes promotoras se han interesado en construir algo a medio plazo».

División vecinal

Para que un nuevo proyecto urbanístico sea posible en este solar de la antigua fábrica de la Sedera de Reus es necesario un cambio de usos

El nuevo Pla d’Ordenació Urbana Municipal (POUM) de Reus prevé que pase a ser de uso residencial, por lo que podrían construirse viviendas, tal y como se ha defendido siempre desde la Associació de Veïns Monestirs.

Eso sí, sus representantes han pedido que si se levanta una zona residencial no sea a base de bloques de pisos, sino unifamiliares que ayuden a mantener una imagen homogénea del barrio Mas Vilanova.

A la espera de que el nuevo POUM pueda ser aprobado en la próxima legislatura municipal (2019-2023), el concejal Arza admite que «si alguna promotora está muy interesada y nos llega a las manos un proyecto sólido y condiciones, también se podría llevar a cabo una modificación puntual del actual plan urbanístico para que empezasen antes las obras».

Cabe recordar que una sentencia de diciembre de 2014 del TSJCat anuló la modificación puntual de la revisión del POUM, por lo que el edificio de la Sedera volvió a tener un uso comercial e industrial y no residencial.

El uso que tenía que darse al solar una vez que la fábrica fuese derruida fue motivo de polémica entre las diferentes asociaciones de vecinos del barrio.

Tanto la asociación Passeig Misericòrdia como la de Mas Vilanova coincidieron en pedir al Ayuntamiento de Reus que aprovechase el solar para habilitar un enorme parking disuasorio, y gratuito, que ayudase a dinamizar el barrio, tanto desde un punto de vista comercial como para facilitar el aparcamiento a sus vecinos.

Por contra, desde la plataforma Salvem la Sedera, de la que formaba parte el presidente de la Associació de Veïns Monestirs, Alfonso Berbel, se recogieron más de 500 firmas en contra de este aparcamiento.

El riesgo de que este espacio acabase convirtiéndose en una zona de botellón y de reuniones nocturnas de jóvenes era, según esta asociación vecinal, demasiado elevado, por lo que siempre se mostró contraria a esta opción.

Además, Alfonso Berbel también recordaba en su día que en el barrio ya hay otros aparcamientos, como por ejemplo el de zona azul que hay muy cerca del solar de la Sedera, y su ocupación no es muy elevada, por lo que un parking disuasorio no era necesario.