El ‘árbol del amor’ plantado en las calles del entorno del Pavelló Olímpic embadurna, dos veces al año, aceras y vehículos como consecuencia del degoteo de un producto de tipo resinoso.
La queja fue presentada, tal y como recogió el Diari, el pasado mes de mayo, ante el Ayuntamiento de la ciudad, junto con más de 200 firmas pidiendo una solución al consistorio por las molestias que ocasionaban los árboles del entorno. El problema, lejos de resolverse, ha empeorado: al degoteo de resina se le ha sumado una plaga de insectos parásitos conocidos con el nombre de ‘cochinillas’, en este caso la algodonosa.
Este insecto afecta a una variedad de plantas y árboles fructíferos de jardín que acaban muriendo. Otro daño que produce es la disminución de la producción y la aparición del ‘hongo negrilla’, que es muy resistente y dificulta la eficacia de cualquier tratamiento.
Juan Antonio Carricondo, la persona que presentó hace dos meses esta queja, reconoce que los técnicos de jardinería «han venido al menos cuatro veces, pero no han sido capaces de erradicar la plaga».
En este sentido, otro vecino de la zona, Ignacio Laguarta reclama «un tratamiento más eficaz». En frente de su casa, a tan sólo unos escasos metros, hay un árbol que padece ‘cochinilla algodonosa’. Laguarta teme que se propague y afecte a su vivienda.
Sobre la petición de los vecinos, meses atrás, el concejal de Via Pública i Medi Ambient, Hipòlit Monseny, aseguró que los árboles afectados recibían «tratamientos fisiosanitarios anuales». Los árboles que mueran serán substituidos por otra especie.