El 94% de los pisos que se levanten en La Hispania serán de protección oficial

El pleno aprueba el Plan de Mejora Urbana de la zona, donde se prevé construir 59 viviendas y 400 plazas de párking. La oposición pide más verde y que la obra respete el patrimonio

18 septiembre 2021 11:08 | Actualizado a 18 septiembre 2021 11:22
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La práctica totalidad de las viviendas que se levantarán sobre la zona azul de la Riera Miró, vinculadas al Plan de Mejora Urbana  (PMU) de La Hispania, serán de protección oficial. La más reciente propuesta trazada por el gobierno municipal plantea construir 59 pisos, 56 de ellos de esta tipología. La cifra representa cerca del 94% de la promoción y supone una mejora respecto al planteamiento anterior, que fijaba la cantidad de inmuebles sociales en tan solo 35. Los 56 pisos ocuparían rodo un edificio completo, con forma de ‘V’ y de planta baja más cuatro, con fachada a la calle Josep M. Arnavat. En un segundo bloque, de tres plantas y que daría al Raval, se ubicarían las tres viviendas restantes, que serían de renta libre.  

El pleno del Ayuntamiento aprobó ayer el PMU, con la abstención del concejal no adscrito Raúl Meléndez, pendiente de que el proyecto ejecutivo del complejo se acabe de perfilar. La concejala de Urbanisme, Marina Berasategui (ERC), expresó en su intervención que ahora confía en que la Comissió d’Urbanisme de la Generalitat lo aborde a finales de año. Débora García (Cs) destacó que «no estaba previsto plantar árboles en la zona, pero gracias a un vecino que presentó alegaciones los habrá», y Mònica Pàmies (CUP) también reclamó «más zona verde» pese a celebrar que «se han rectificado algunas carencias de movilidad que había». Por su parte, Ana Martínez (PSC) advirtió a Berasategui de que «la muralla está cercana» al lugar donde se intervendrá y pidió que, «aunque ya se ha dicho que no se conocen riesgos, se haga un informe para valorar que no se dañe el patrimonio». Respecto a las viviendas, los socialistas apuntaron que «falta mucho por saber sobre cómo serán, sobre cómo irán, cosa que quisiéramos conocer» y le recordó al alcalde Carles Pellicer (JxR) que «en su día anunció que se harían 1.000 pisos sociales y no tenemos constancia, hasta este momento, de que se haya generado ninguno». 

La calificación del solar entre la Riera d’Aragó, el Raval de Sant Pere y la calle Josep M. Arnavat en el marco del acuerdo plenario implica un aspecto importante: esquiva la caducidad de la protección oficial de las viviendas. La ordenación, tal como sostiene el gobierno, «resuelve la conexión fluida a pie entre Horts de Miró y el centro y crea una plaza que se integrará en la trama de calles». Será rectangular, de unos 1.800 metros cuadrados y comunicará, a través de un pasaje, el Raval de Sant Pere y la calle del Aigua Nova. En cuanto a las construcciones, se reservarán 1.000 metros cuadrados destinados a equipamientos. El Mapa de Lectura Pública preveía en ese punto, años atrás, una biblioteca, pero fuentes municipales insisten en que el uso del espacio «se está analizando». También habrá locales comerciales y todo el subsuelo se dedicará a un párking subterráneo de tres plantas y 400 plazas. El párking lo construirá Reus Mobilitat i Serveis, pero está por concretar la fórmula para el resto.

La gestión del CAIF

El pleno se celebró ayer de forma parcialmente presencial, por primera vez desde la Covid-19. Estrenó, de hecho, un formato híbrido previsto en el Reglamento Orgánico Municipal (ROM), con algunos concejales en el palacio consistorial y otros en casa. Para garantizar las distancias, se instalaron mesas en el espacio del Salón de Plenos habitualmente reservado para el público. La sesión también supuso un paso adelante para otro proyecto relevante, el del futuro Centro de Aguas y Fitness, que ha venido a denominarse CAIF.

Con los votos del gobierno (JxR, ERC, Ara Reus) y Cs, recibieron luz verde los pliegos de cláusulas administrativas y técnicas que regirán la licitación de la concesión de obra y explotación de este equipamiento. Pàmies criticó que «las instalaciones no son públicas, se explotarán a nivel privado» y lamentó que el gobierno justifica su necesidad con encuestas y estudios obsoletos. También Andreu Martín (PSC) destacó que, con el CAIF, «los ciudadanos pagan dos veces: ustedes ponen el dinero público, y además, los vecinos pueden pagar unas cuotas más elevadas». El concejal de Esports, Pep Cuerba (JxR), defendió que «afrontamos una concesión de obra y explotación por ser la fórmula más coherente», salió al paso de las críticas de los clubes de la ciudad que temen que este proyecto les perjudique y aseguró que «el CAIF no les quiere hacer la competencia».

Igualmente ayer se aprobó que la nueva plaza del Passeig de la Boca de la Mina, frente a la Escola Mowgli, lleve el nombre de la pedagoga M. Àngels Ollé. Solo Cs votó en contra, escudándose en que «se le concede por su actividad dentro del independentismo», a lo que el alcalde respondió refiriéndose a esta plaza como «la de todos».

En el apartado de propuestas de los grupos, prosperó –con la abstención de Cs y de Meléndez– una declaración en rechazo a la línea eléctrica aérea de muy alta tensión MAT Valmuel-Begues. También lo hizo, pese al «no» de la CUP, otra del grupo socialista para que Reus participe, como Ayuntamiento, en la Conferencia sobre el futuro de Europa en el mundo local. Una de los cupaires que buscaba el apoyo a la internalización del servicio del 112 y la de Cs para el fomento de la formación profesional en Reus no salieron adelante.  

Cs planteó una moción para tratar de que «el Ayuntamiento  informe con carácter anual en el pleno del estado de ejecución de las mociones aprobadas presentadas por la oposición» y para que lo plasmase, trimestralmente, ‘online’. La concejala de Transparencia, Montserrat Flores (ERC), apuntó que «el gobierno rinde cuentas de manera proactiva a través de diferentes herramientas y también de manera reactiva por los canales establecidos para ello». La moción tuvo el apoyo de toda la oposición, pero el gobierno la tumbó. El PSC presentó una para mostrar el compromiso con los derechos de las personas LGTBI que se aprobó por unanimidad. La última moción la formuló la CUP para «pasar el cobro de los tributos –que permiten un rendimiento económico– del agua en forma de tasa –que es finalista». La concejala de Hisenda, Mariluz Caballero (JxR), indicó que «el gobierno no la podemos votar a favor porque desde el punto de vista tecnicojurídico no es posible». 

A preguntas de la CUP, el regidor de Cultura, Daniel Recasens, explicó que en lo que va de año los concejales han hecho uso de 107 entradas para el Fortuny y 78 para el Bartrina sin coste. En un ruego Meléndez pidió un plan de seguridad nocturno en diversas zonas de la ciudad. La concejala de Seguretat, Dolors Vázquez (Ara Reus), respondió que «si se hace un plan debe ser integral y no solo nocturno». 

El Centro de Aguas eliminará las pistas exteriores del Pavelló Olímpic

La construcción del Centro de Aguas y Fitness (CAIF), las piscinas cubiertas, comportará la desaparición de las pistas deportivas exteriores del Pavelló Olímpic. Es así porque el nuevo equipamiento ocupará los terrenos donde estas se encuentran. En este sentido, fuentes municipales indican que igualmente «se mantendrá un espacio exterior para usos deportivos públicos». La licitación de la obra y la explotación del CAIF premiará a las empresas que destinen metros cuadrados de fuera del edificio a esta finalidad.  El ámbito de la actuación urbanística del Centro abarca un total de casi 8.000 metros cuadrados y una edificación que se aproxima a los 5.000 metros. Será, tal como lo perfila el gobierno, un equipamiento multidisciplinario abierto a todas las franjas de edad y a cualquier condición física, que podrá absorber 4.000 abonados. Contará con varias piscinas cubiertas, salas para actividades y espacios comerciales.

La regulación de las actuaciones artísticas en la calle aún es un borrador

El concejal de Cultura, Daniel Recasens, explicó ayer a preguntas del PSC sobre la voluntad de regular las actuaciones artísticas en la calle, que «hemos trabajado en un borrador de reglamento que se encuentra en la fase de retorno con la persona que representaba al colectivo cuando se nos hizo una propuesta ciudadana». Y añadió que ese borrador «ha transitado desde un momento inicial en que solo contemplaba actuaciones musicales hacia la posibilidad de presencia de artistas de otros ámbitos». Recasens indicó que la regulación «requerirá la participación de otras áreas más allá de Cultura» y destacó que la Covid hizo que «no fuese una prioridad».   

 

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