La hostelería de Reus espera atraer a más visitantes con el World Padel Tour

Hace días que Reus respira a pádel. La plaza del Mercadal se ha convertido, desde el pasado 10 de marzo, en el centro neurálgico, con una gran pista donde se disputan las finales de la segunda edición del Open Reus Pro Pàdel. El evento está organizado por el Ayuntamiento de Reus como previa al World Padel Tour, que empezará el próximo lunes. Es entonces cuando la ciudad espera mayor movimiento y que todo ello repercuta también sobre la economía local.

Los partidos que ahora se disputan en el Mercadal atraen la mirada de todo tipo de curiosos y, de rebote, los bares y restaurantes de la zona también se llenan. Algunos, como Rodrigo, del restaurante Déu N’hi Do, ven una relación directa con el evento deportivo. Otros restauradores de la misma plaza no opinan lo mismo. «Las terrazas se llenan, pero como vendría ser habitual un fin de semana», puntualizan, aunque coinciden en que «es positivo que se hagan actividades de este tipo en la ciudad».

Víctor Perales, presidente de la Associació d’Empresaris d’Hostaleria (AEH) de Reus, señala que por ahora la valoración es positiva, habiendo notado cierto ascenso de la actividad desde la puesta en marcha del Open, hace un par de semanas. En todo caso, recalca que el mayor impacto se espera a partir del lunes y hasta el 2 de abril, cuando se celebrará la TAU Cerámica Reus-Costa Daurada Open 2023, prueba regular del prestigioso World Padel Tour. «Todo lo que mueve el Open es gente de la zona que ya nos conoce, pero distinto es con el World Padel Tour. Es aquí donde incidimos y podemos notar un mayor retorno», señala Perales.

El Pavelló Olímpic será la pista central de la competición, pero con la campaña ‘Menja’t el Pàdel’ la idea es atraer a deportistas y aficionados hacia restaurantes y comercios de la ciudad. A través de esta iniciativa, de AEH de Reus, El Tomb y las concejalías de Esports y de Promoció de Ciutat, se ha creado de un directorio con la oferta gastronómica de Reus, clasificada por: comida casera, de autor, de copas, fast food, internacional, mediterránea, pizzerías y de tapas. Tanto en la plaza Mercadal como en el Pavelló Olímpic hay instalados unos paneles con el logo de ‘Menja’t el Pàdel’ acompañado por un código QR que los usuarios pueden escanear y acceder al directorio.

«Ya que prácticamente todos los equipos están alojados en hoteles de la costa, lo que buscamos es que deportistas y seguidores no únicamente vengan a Reus por la competición, sino que haya un retorno», relata el presidente de AEH de Reus. Y es por ello que el gremio ha apostado por esta fórmula que permita a los visitantes conocer la oferta gastronómica de la ciudad de una forma sencilla. Aunque inicialmente era una propuesta de la restauración, el comercio también ha querido sumarse. «Hemos editado unos trípticos informativos que se encuentran en los restaurantes», explica.

A falta de datos cuantitativos de ‘Menja’t el pàdel’, «las primeras impresiones son buenas, con un impacto positivo en los locales de restauración en cuanto a la afluencia de clientes y al consumo, sobre todo los fines de semana», valora la concejala de Promoció de Ciutat, Montserrat Caelles, que añade: «Seguro que las personas aficionadas al pádel, que estos días están disfrutando de este deporte en medio de la ciudad, agradecen esta actividad y que se haya contado con ellos».

También Pep Cuerba, concejal de Esports, recuerda que «los grandes eventos deportivos, como el Open Reus Pro Pàdel y el World Padel Tour, son una buena oportunidad de proyección de ciudad, desde el ámbito turístico y desde el ámbito deportivo». El año pasado, la competición internacional hizo parada por primera vez en la capital del Baix Camp y el consistorio ya aprovechó para escalfar motores con la primera edición del Open Reus Pro Pàdel. Entonces, «ya generamos muy buen ambiente en el centro de la ciudad y este año se ha dado un paso adelante para atraer, tanto a las personas participantes como a los acompañantes y espectadores, al comercio y la restauración», subraya Cuerba. Y es que, como recuerda Perales, «vino mucha gente a Reus para las competiciones, pero no pernoctaban en la ciudad ni tampoco vimos un retorno».

Esta vez, a nivel hotelero, la ciudad tampoco aloja a los equipos, sino que están en establecimientos de la costa. Aun así, el sector espera que para el fin de semana del 1 y 2 de abril poder superar el 70% de la ocupación. Así lo estima Magdaleno Pareja, representante de los hoteleros de la ciudad en la Associació d’Empresaris d’Hostaleria de Tarragona y director del hotel Reus Park.

De entrada, desconoce qué porcentaje de las reservas pueden estar directamente vinculadas a la competición deportiva. Y es que este incremento de las reservas también puede deberse a la llegada del buen tiempo y la proximidad con Semana Santa. No obstante, Pareja señala que las competiciones deportivas siempre acaban repercutiendo en los hoteles de la ciudad.

Para el presidente de la Associació d’Empresaris d’Hostaleria (AEH) de Reus, Víctor Perales, lo que ha faltado es tiempo para poder trabajar una mejor propuesta, «con cara y ojos». «Lo supimos con poca antelación», admite, por lo que cree que, si vuelve a darse la oportunidad, hay que prepararlo con más tiempo. A nivel hotelero, Perales es consciente de que la ciudad no tendría suficiente capacidad para alojar a los deportistas y a toda la gente que mueve competiciones de este calibre, «pero al menos podrían llenarse primeramente los hoteles de Reus y, después, ir expandiéndose», subraya.

El World Padel Tour desembarca a la ciudad de Reus el próximo lunes, 27 de marzo. Lo hará con un total de 240 deportistas que, durante ocho días (hasta el 2 de abril), disputarán 150 partidos oficiales. Habrá 72 parejas masculinas y 48 de femeninas, que se disputarán el trofeo de ganador y la máxima acumulación de puntos para optar los primeros puestos del ranking mundial. El Pavelló Olímpic será la pista central del evento.

Esta será la segunda vez que la capital del Baix Camp acoge esta competición. El año pasado, el impacto económico para la ciudad fue de más de 1,5 millones de euros y alrededor de 12.000 visitantes.