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Santuari de Misericòrdia; rotondas y medianas de autovías como la de Tarragona o descampados en los barrios Montserrat y Gaudí. Éstas son algunas de las acciones de recuperación de zonas verdes que la concejalía de Medi Ambient ha realizado estos últimos meses. Según explica el concejal del área, Hipòlit Monseny, han sido actuaciones pequeñas con el fin de consolidar espacios que estaban abandonados o nunca habían contado con vegetación.
En estos momentos, añade, se está actuando en la mediana de la autovía de Bellissens y, en un futuro, se actuará en la plaza Joaquim Sorolla –carretera de Alcolea– y sus aledaños. Tampoco hay que olvidar la inminente inauguración del parque del barrio Mas Pellicer que, además, incluye una pista polideportiva.
En estos momentos, la ciudad cuenta con un total de 116 hectáreas de zona verde repartidas entre plazas, avenidas, parques y superficies de otras tipologías como los paseos o los polígonos. Esta cifra supone que la ratio actual sea de unos 10 metros de zona verde por persona, lo que se considera como «óptimo» para una ciudad del tamaño y tipología de la capital del Baix Camp.
Además, desde Medi Ambient destacan que el modelo implantado con los años permite que todas las zonas y barrios dispongan de espacios con vegetación. Tampoco puede obviarse que, a pesar de que el crecimiento de la ciudad lleva años estancado, la superficie de espacios verdes sí que se ha incrementado en la última década. Así pues, el Parc Sant Jordi continua como el principal pulmón verde de la ciudad sin contar todo el espacio del parque del Roquís.
A todo esto también hay que sumar que la concejalía de Medi Ambient también se hace cargo de los 450.000 metros cuadrados que corresponden a los solares municipales que pueblan el municipio. Otro dato relevante es que, en la actualidad, se contabilizan unos 32.000 árboles en la ciudad. Un número que se vienen manteniendo similar durante los últimos años. La especie mayoritaria son los plataneros, mientras que en la actualidad, cuentan, los que se potencian más son los almez por ser autóctonos y por encajar mejor con el clima mediterráneo.
Aplicar el ciclo natural
Las actuaciones que Medi Ambient viene realizando en las afueras de la ciudad son diametralmente opuestas a las del centro de la ciudad. En las zonas más alejadas se ordena más el paisaje de una forma más sostenible y alejada de la jardinería. Además, desde la concejalía subrayan que siempre actúan reaprovechando la materia orgánica vegetal que resulta de la poda de los árboles para generar un césped natural que se expande por estas zonas.
