Raval Santa Anna, skatepark y Centre Social El Roser verán la luz en 2022

Para este año también se prevé el carril bici de Blancafort y que Reus Energia inicie la comercialización de la luz

15 enero 2022 19:30 | Actualizado a 17 enero 2022 06:03
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Reus destinará 19,5 millones de euros a inversiones este 2022. Una dotación que servirá para hacer avanzar a un total de 75 proyectos. Algunos de ellos todavía se encuentran en un estadio inicial, otros están ya muy avanzados y se prevé que vean la luz este año. Como afirma el alcalde de Reus, Carles Pellicer: «Veremos una auténtica transformación de la ciudad con las obras de algunos de los proyectos más destacados del mandato».

Si 2021 fue el año de grandes obras como la remodelación del Passeig de la Boca de la Mina o la finalización del traslado del Centre Mèdic Quirúrgic (CMQ) de Reus al antiguo hospital, este 2022 será el de la puesta en marcha del Centre Social El Roser (ya ha iniciado la actividad), el nuevo skatepark, la creación del reclamado carril bici de Blancafort, el retorno de los presupuestos participativos y el empujón definitivo de Reus Energia, la nueva empresa eléctrica municipal, entre otros.

También se dará continuidad a otros grandes proyectos que se alargarán durante 2023, como la transformación del espacio que ocupaban las antiguas cocheras de Hispània, en la Riera de Miró, donde se construirán 63 viviendas (sesenta, con protección oficial); o el nuevo Centre Cívic Gregal.

«Hemos acelerado la tramitación y ejecución de los diferentes planes de inversiones del mandato con la voluntad de terminar los proyectos y ponerlos a disposición de la ciudadanía lo antes posible», explica la vicealcaldesa de Reus, Noemí Llauradó. Como recuerda, «lo hemos hecho en unos años marcados por la pandemia», pero «sin que ésta haya supuesto un impedimento para el impulso inversor del Ayuntamiento, que nos permite pasar de la reactivación a la acción, para mirar hacia el futuro con optimismo», según Llauradó. Así también se expresa Carles Pellicer, que destaca que se trata de «proyectos que son fruto del esfuerzo inversor más importante que el Ayuntamiento de Reus ha realizado en los últimos años, y que hemos cuidado para que cubran el conjunto de la ciudad, desde el norte, con la Boca de la Mina; al sur, con la estación de Bellissens; al oeste, con el parque del deslizamiento; y al este, con el Centre Social El Roser, entre otros muchos».

Uno de los proyectos que en breve estará listo, y con mayor afectación para peatones, vecinos, comercios y conductores, es la peatonalización del Raval de Santa Anna, en el tramo entre la plaza de Prim y la calle Santa Anna. Sacar los vehículos de tracción mecánica del centro de la ciudad y dar más espacio al transeúnte, dando prioridad a la movilidad sostenible, es uno de los objetivos que persigue el gobierno. Después que en los últimos años ya se haya actuado en varias calles de la ciudad en esta línea, ahora se ha empezado a hacer en los arrabales con este primer tramo del de Santa Anna. Tras una prueba piloto, a principios de octubre se iniciaban las obras de peatonalización, después de haberse renovado la red de saneamiento.

Los trabajos se pusieron en pausa por la campaña de Navidad, periodo en el que ya se pudo pasear por este tramo, sin la circulación de vehículos y la parte de la calzada elevado, prácticamente a la mismo nivel que las aceras. Una vez pasadas las fiestas, los trabajos se han retomado, encarando ya la recta final. Falta pulir el asfalto, que tendrá un color más rojizo, instalar mobiliario urbano y también la parte tecnológica. Y es que habrá bolardos con lectores de matrícula, pantallas informativas del estado del tráfico y cámaras de videovigilancia.

Los trabajos se están haciendo por un importe de 374.650,80 euros y cabe recordar que tendrán continuidad con una segunda fase que afectará, por un lado, el tramo hasta la plaza de Catalunya y, por otro, la calle de Salvador Espriu.

El Centre Social El Roser es otro de los grandes proyectos que quedará zanjado este 2022. De hecho, y tras finalizar las obras de adecuación de la antigua prisión, el equipamiento ya ha entrado en funcionamiento con el traslado de los servicios municipales y la apertura del servicio de alimentación. Lo que quedará, ahora, pendiente es el servicio de alojo, con capacidad para albergar a 16 personas en riesgo de exclusión social. Algo que se prevé para abril.

El nuevo parque de deslizamiento, con la creación del skatepark y un parque urbano, será el gran equipamiento de carácter deportivo que verá la luz este 2022. Una larga reivindicación de los usuarios que, al fin, verá sus frutos en la zona de las piscinas municipales. También las políticas de medioambiente tendrán un papel destacado, con la puesta en marcha de Reus Energia, la nueva empresa eléctrica municipal que tiene que iniciar la comercialización de luz durante el primer trimestre del año.

Otros trabajos que se llevarán a cabo este 2022 son la rehabilitación de Mas Totosaus para usos administrativos, la reforma de la nave de la plaza de Enric Yzaguirre para transformarla en la nueva sede de la Associació de Voluntaris de Protecció Civil, la creación del Jardí Agrari y el Parc de les Olors en la Boca de la Mina (en la recta final) o la creación de una rotonda de acceso a Mas Carpa.

Otros proyectos seguirán dando pasos adelante. Es el caso de la futura estación de Bellissens. Recientemente se ha adjudicado la redacción del proyecto, así que en los próximos meses se definirá cómo tiene que materializarse. También avanzará el centro acuático y de fitness, que ya está en proceso de licitación, o el proceso para transformar el Mercat del Carrilet y su entorno. El proceso participativo finalizó, a la espera de hacer públicos los resultados, previsto para principios de año.

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