Roban los picaportes de la modernista Casa Punyed de Reus

El propietario de la farmacia del histórico inmueble se percató de que faltaban los elementos escultóricos a primera hora de la mañana

29 septiembre 2018 15:52 | Actualizado a 06 octubre 2018 19:35
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Como todos los días, Pau Sans acudió por la mañana para abrir la farmacia del número 47-49 de la calle Llovera. Entonces se dio cuenta de que faltaban los picaportes de la puerta de la Casa Punyed, un edificio modernista protegido como bien cultural de interés local y proyectado por el arquitecto Pere Caselles. «Cuando llegué por la mañana para abrir la farmacia, a las nueve menos cuarto, me di cuenta de que faltaban los picaportes», asegura Pau Sans.

El arquitecto Anton Pàmies recuerda que «la que conocemos como Casa Punyed en la ruta modernista de Reus, realmente era la casa de los hermanos Yglesias Òdena, propietarios del Vapor Vell y los planos son del 1900 y firmados por Pau Monguió, arquitecto tarraconense, amigo y compañero de Pere Caselles, el arquitecto que realmente proyectó y dirigió las obras». Él mismo recuerda que «hasta 1908 no se instaló en los bajos el farmacéutico Punyed Lloberas».

Sobre el valor de los picaportes, Anton Pàmies detalla que «se trata de unas piezas de fundición partiendo de unos moldes escultóricos de autor hoy desconocido, pero de un importante valor artístico». En cuanto al valor patrimonial de la puerta del edificio modernista, el arquitecto Anton Pàmies explica que «el ebanista fue Enric Oliva, un conocido industrial de la madera, que ya había hecho un gran trabajo en la casa Tarrats del 1891 y que en 1910 lo haría en la Casa Grau-Pla del número 32 de la calle Sant Joan, ambas de Pere Caselles».

«La gran puerta de entrada a la escalera desde la calle Llovera presenta un cierre con dos hojas de madera, hoy pintadas de un color marrón oscuro, con un enmarcado, unos plafones superiores y un enllatat en diagonal y con algunas maderas recortadas según un cierto estilo coup de fuet que marcan el paso del estilo neogótico al modernista más floral, propio del Caselles del período 1900-1910», explica Anton Pàmies. Al respecto, Marc Ferran, director del Museu de Reus, asegura que «es una lástima que hayan desaparecido porque son elementos que forman parte de la decoración integral del edificio modernista».

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