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Casi un mes y medio después de estrenar sus juegos pintados, que cubren parte del Raval de Sol i Vista para ofrecer nuevas alternativas de ocio y entretenimiento a las familias, el barrio los ha abierto a todos los niños mediante un taller. La mañana de este 26 de noviembre, los pequeños pudieron «aprender a aprovechar al máximo las opciones que los juegos plantean», tal como explica la presidenta de la Associació de Veïns de Sol i Vista, Ana Belén Castaño.
Fue la propia entidad la que impulsó la creación de esta especie de mural horizontal, que es el segundo que se pinta en la ciudad, y la propuesta fue canalizada a través de Acció Comunitària. El barrio Gaudí había sido el primero en inaugurar una instalación de este tipo, en la plaza de la Sagrada Família.
«Parece que están gustando»
Castaño expresa que «estamos muy contentos porque los juegos han tenido buena aceptación y parece que gustan», y dice que «van a servir para que los niños puedan pasárselo bien en la calle y son algo positivo para Sol i Vista».
Los juegos se han diseñado a partir de la observación de cómo pequeños y adolescentes se entretenían en la plaza de manera espontánea y tienen la finalidad de recuperar la calle como zona de interacción social, familiar y vecinal mediante un circuito central que reinterpreta la tradicional rayuela para permitir la diversión autónoma.
La jornada de hoy llevaba por título Dracs i Criatures, en referencia al dragón que es la mascota de la Escola Cèlia Artiga, el colegio de proximidad del barrio. Además del taller, también se sirvió un desayuno a los participantes.
