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La adjudicación de las obras de construcción de la estación Intermodal que tenía que ubicarse junto al Aeropuerto de Reus se ha visto salpicada por un caso de presuntos sobornos. Según publicó El Periódico de Catalunya en su edición de ayer, un juzgado de la localidad madrileña de Alcalá de Henares investiga los presuntos sobornos de la empresa Ferrovial a altos cargos directivos de Adif, para la adjudicación de las obras de algunos tramos catalanes del AVE entre Madrid y la frontera francesa. Entre estas denuncias también estaría la adjudicación de las obras de la estación Intermodal de Reus.
Concretamente, los tramos investigados por el juez son el del Papiol-Sant Vicenç dels Horts (Baix Llobregat) y Riels-Massanes (Selva), además del montaje de Sant Feliu de Buixalleu (Selva), las obras complementarias de Riells-Massanes y la estación Intermodal de Reus, cuya construcción se suspendió en 2010.
Este juzgado de Alcalá de Henares ha abierto la investigación a raíz de la denuncia presentada por un ex trabajador de Ferrovial, quien estuvo en la empresa entre los años 2006 y 2011 como auxiliar administrativo y oficial de segunda. Este ex empleado apunta en su denuncia y posterior declaración ante el juez que directivos de Adif percibieron dinero en efectivo, regalos y prebendas de forma habitual para favorecer a la empresa constructora.
En su escrito inicial en el juzgado, este ex trabajador aseguró que Ferrovial había gestionado en 2007 el envío de material eléctrico para la construcción de una vivienda de un directivo de Adif en Palencia. En su posterior comparecencia ante el juez para ratificar la denuncia, añadió que este material -por valor de unos 20.000 euros- lo había comprado él mismo. Por otra parte, puso en conocimiento del juzgado el viaje de un ejecutivo de Adif y un jefe de obras de Ferrovial a Suiza.
Las obras, paradas desde 2010
Las obras de la estación Intermodal de Reus, junto al aeropuerto, se adjudicaron en 2009 por un valor de casi 54 millones de euros a la empresa Ferrovial Agromán. Un año después, en abril de 2010, empezaron los primeros trabajos de movimientos de tierras, hasta que a finales de agosto de ese año las obras se paralizaron. En su día, el entonces ministro de Fomento, el socialista José Blanco, justificó la suspensión de los trabajos por la coyuntura económica, hasta el día de hoy que todavía siguen parados.
Las últimas informaciones del gobierno español sobre le proyecto de Reus datan de junio de 2012. Entonces, la ministra Ana pastor aseguró que «elproyecto continua figurando en los planes del gobierno del Estado y su construcción, en ningún caso, está desprogramada».
