Catalunya ha encadenado cinco asesinatos en los últimos cinco días, dos de ellos en Badalona (Barcelona), a pesar de que esta comunidad tiene una de las tasas de homicidios más bajas de Europa, tal como destacaron en noviembre pasado los responsables de seguridad de la Generalitat.
Se trata de cinco asesinatos que, según las primeras hipótesis policiales, no están relacionados entre sí, y por los cuales hasta el momento ya se han detenido a los presuntos autores de tres de ellos.
El primer asesinato ocurrió el jueves pasado, 30 de enero, hacia las 8:40 de la mañana, cuando un hombre murió a causa de las lesiones con arma blanca que recibió en un piso de la calle Reina Amàlia de Barcelona. Por este caso, los Mossos ya han detenido a un hombre de 41 años.
A las 00:30 del día siguiente, viernes 31 de enero, un joven de 24 años murió por una agresión en la vía pública en Santa Perpètua de Mogoda (Vallès Occidental), crimen por el cual el supuesto autor ya permanece en prisión provisional por homicidio.
Posteriormente, alrededor de las 20:00 del pasado sábado 1 de febrero, un hombre de 53 años murió debido a las heridas de arma blanca que recibió en el edificio de su casa en Vilanova del Camí (Vallès Occidental), en un caso que los Mossos investigan si se originó por una disputa vecinal provocada por el alto volumen de la música.
Por este caso, los Mossos también han detenido al supuesto autor del homicidio.
Los dos últimos homicidios, ahora mismo sin detenidos, han ocurrido en Badalona: el primero de ellos alrededor de las 23:30 del domingo 2 de febrero, en una agresión entre dos personas en un piso de esta localidad, en la que ambos resultaron heridos.
Uno de los heridos, de 36 años, murió a causa de la agresión con arma blanca, posiblemente un hacha, en un caso que, según las primeras hipótesis policiales, podría estar relacionado con una disputa entre bandas rivales vinculadas al tráfico de drogas.
Finalmente, alrededor de las 23:00 del lunes 3 de febrero, se produjo el segundo crimen violento consecutivo en Badalona: un hombre de 49 años fue encontrado muerto en el local de la calle Iberia donde vivía, con las manos y los pies esposados, y había sido “torturado a golpes” y “severamente golpeado” en la cabeza, según el alcalde, Xavier García Albiol.
Según el visor de datos delictivos de los Mossos d’Esquadra, en 2024 se registraron 63 homicidios y asesinatos en Catalunya, una cifra a la baja en comparación con los 69 del año 2023.
Asimismo, según los mismos datos de los Mossos, en 2022 hubo 61 homicidios y asesinatos; en 2021, 56; en 2020, 51; en 2019, 61; en 2018, 45; y en 2017, 72, incluyendo las 16 víctimas de los atentados terroristas en Barcelona y Cambrils (Baix Camp).
Sin embargo, estas cifras siguen por debajo de las registradas en años anteriores, según los datos de la Generalitat: 82 en 2009; 96 en 2010; 77 en 2011; y 75 en 2012, antes de encadenar un descenso significativo en 2013 (43), 2014 (56) y 2015 (43).
De hecho, el director de la Policía de la Generalitat, Josep Lluís Trapero, afirmó en su primera comparecencia en el Parlamento, el pasado 20 de noviembre, que, respecto a las prácticas delictivas “más graves” y a la criminalidad más violenta, Catalunya es un “país seguro” y destacó que la tasa de homicidios es una de las más bajas de Europa y del mundo.
Sin embargo, reconoció que el aumento del uso de armas de fuego, vinculadas al tráfico de drogas, les preocupa, y admitió que “la calle se ha complicado”.
Precisamente, Trapero comparecerá mañana en el Parlament, junto a la consellera de Interior, Núria Parlon, para abordar los últimos incidentes de inseguridad en Sant Adrià de Besòs (Barcelona), a raíz de un tiroteo en La Mina, el pasado 7 de enero, que ha llevado a los Mossos d’Esquadra a reforzar su presencia en la zona