Vecinos de Ponent: «Cuando llega cierta hora de la tarde, las mujeres ya no salen a la calle por miedo»
La percepción de inseguridad crece en los barrios de Ponent. Por su parte, la Guàrdia Urbana de Tarragona encargará un estudio para instalar cámaras de videovigilancia

Los vecinos aseguran no sentirse seguros ni en la calle ni en el interior de sus casas.
La percepción de inseguridad en los barrios de Ponent está creciendo en los últimos meses. Después de registrarse tres apuñalamientos en menos de un mes, los vecinos aseguran estar preocupados por su seguridad. Tanto que, según la Federació d’Associacions de Veïns de Tarragona (FAVT), «cuando llega cierta hora de la tarde, las mujeres ya no salen a la calle por miedo». Según las entidades vecinales, en los últimos meses han tenido lugar asaltos al interior de domicilios, hurtos en coches, robos con violencia a plena luz del día y muchos episodios de incivismo, como quema de contenedores y conducciones temerarias.
Los vecinos piden más presencia policial en sus barrios y agentes de proximidad que se paseen a pie por las calles. «No se trata solo de actuar cuando se comete un delito. También es importante prevenirlo», explican desde la FAVT.
Por su lado, desde la Guàrdia Urbana están trabajando para poner en marcha un estudio que concrete qué sistema de videovigilancia instalar y en qué puntos. «Todavía no tenemos claro si necesitamos cámaras o lectores de matrícula, como hay en Llevant y que han funcionado tan bien», explica el responsable de la Guàrdia Urbana de Tarragona, el intendente Manel Vázquez, quien añade que «quizás yo sería partidario de instalar los dispositivos en las entradas y salidas de los barrios».
Los vecinos aseguran que la situación ya se ha vuelto insostenible, porque no se sienten seguros ni en la calle ni en sus casas. «Hay personas que se sienten vulnerables en un entorno muy desfavorecido», explican desde la FAVT, quienes insisten en qué «hay puntos concretos de Ponent donde, a partir de cierta hora, se forman grupos de hombres y las mujeres se sienten intimidadas». Algunas de ellas optan por no salir a la calle dependiendo de la hora del día. «Es difícil de explicar, pero te miran de una forma intimidatoria, que no sabes porqué pero te da miedo. En resumen, te da miedo salir a la calle y acabas optando por quedarte en casa», asegura Ana Ruiz, vecina de Campclar.
Las entidades vecinales creen que esta sensación de inseguridad viene a raíz de los últimos acontecimientos ocurridos en Ponent, donde se registraron tres apuñalamientos a plena luz del día en menos de un mes. Al final resultó que uno de ellos era un tema de autolesiones y quedó en nada.
La percepción de inseguridad también viene alimentada por un aumento de actos vandálicos y de incivismo. «Vemos como hay coches que pegan acelerones y frenazos repentinos, asustando sobretodo a las personas mayores», explica la FAVT, quien también destacan conductores de patinete sin casco y perros de raza peligrosa sin bozal. «Estamos siendo testigos del deterioro del mobiliario. Por ejemplo, el del Anillo Mediterráneo. Lo rompen todo», explican desde la federación de vecinos.
Los vecinos aseguran que no denuncian todo lo que deberían. «Vemos como delitos, como por ejemplo los robos, quedan en nada. Hay cierta impunidad», dice Luis Oya, vecino de Torreforta. La FAVT asegura que esta impunidad crea «una sensación de vulnerabilidad y de indefensión generalizada entre la ciudadanía».
La entidad reclama más policía de a pie y celebra que el proyecto de las cámaras de videovigilancia vaya avanzando a buen ritmo.
Un plan de acción policial
El intendente Manel Vázquez asegura que es cierto que en Ponent hay una concentración importante de hechos, «que hace que crezca la sensación de inseguridad. Pero no es preocupante». El jefe de la Guàrdia Urbana de Tarragona explica que se está trabajando insitu, en un plan de acción para aumentar la sensación de seguridad en la vía pública. El primer barrio de Ponent donde se ha aplicado este plan de acción ha sido Bonavista.
Marc Colilla, presidente de la Associació de Campclar Zona Esportiva, destaca que «no todo se soluciona poniendo más policía. Creemos que si se mejorara la iluminación de algunos puntos, nos sentiríamos más seguros», dice Colilla, quien pone como ejemplo de plaza oscura el parque de la calle Riu Anoia.
Por su parte, Miguel Ángel Cruz, de la Associació de Veïns de La Floresta, se centra en las personas mayores. «Oyen por la tele o en la plaza que han robado a no se quién y en seguida se asustan», explica Cruz, quien añade que «la solución pasaría por que hubieran más agentes paseando por las calles de nuestros barrios, dando apoyo a las personas más vulnerables».