Medioambiente
En el 'limbo' casi 1.900 millones de euros de inversión en renovables en Tarragona
Un total de 278 parques eólicos y plantas solares en el Camp y las Terres de l’Ebre avanzan con cuentagotas entre trámites, evaluaciones y autorizaciones. La caída del decreto para impulsar estas energías suma otra vuelta de tuerca a la lentitud existente

Uno de los parques eólicos en funcionamiento en Tarragona.
La implantación de energías renovables en Catalunya avanza con una lentitud que preocupa al sector y a la Administración. En las comarcas del Camp de Tarragona y las Terres de l’Ebre hay registrados 278 proyectos de renovables sobre terreno –sumando eólica y fotovoltaica– que acumulan una inversión prevista de casi 1.900 millones de euros, pero que siguen pendientes de autorizaciones o trámites administrativos. Esta parálisis ha convertido a Tarragona en un símbolo más de las dificultades para avanzar en la transición energética.
Eólica: 36 proyectos y 747 M€
En el caso de la energía eólica terrestre, Tarragona y Terres de l’Ebre concentran un total de 36 proyectos con una potencia prevista de 756,98 MW. La inversión acumulada supera los 747 millones de euros, con una generación potencial de más de 2.350 gigavatios-hora (GWh) anuales, lo equivalente a un 30% de lo que genera uno de los reactores nucleares situados en la demarcación.
En el caso de la energía eólica terrestre, Tarragona y Terres de l’Ebre concentran un total de 36 proyectos
Sin embargo, la mayoría de estas iniciativas permanecen en tramitación: en el Camp hay 19 parques (584 GWh), mientras que en el Ebre son 17 (1.766 GWh). Solo uno de ellos, de 91,8 GWh en el Camp, se encuentra en construcción. Varios en las comarcas ebrenses ya disponen de declaración de impacto ambiental favorable, pero esperan aún la autorización definitiva.
Proyectos de renovables en Tarragona
Fuente: dialEc
"Tenemos proyectos de tres parques eólicos en la Segarra que conectan con la subestación de Puigpelat, que están en tramitación desde 2020 y no hay manera de que se aprueben", denuncia Jaume Morron, consultor en comunicación de proyectos de renovables y exgerente de EolicCat.
Jaume Morron: "Las plantas solares pequeñas, de 2 o 3 MW, tardan más de dos años"
"La Comissió Territorial d’Urbanisme pone todas las pegas del mundo. La manera de que nos creamos esta buena voluntad del Govern, que está mostrando un gran interés en aclararlo todo con hechos, es que esos proyectos que están encallados se desencallen", añade. Para el consultor, "la voluntad del Govern existe, pero falta ver hasta dónde llegará". Una de las medidas estrella es la creación de la Comissió Interdepartamental per a la Transició Energètica, cuyo objetivo es desencallar iniciativas.
Solar: 242 proyectos y 1.147 M€
La situación es aún más significativa en el caso de la energía solar fotovoltaica. Entre Tarragona y las Terres de l’Ebre se contabilizan 242 proyectos, con una generación conjunta de 3.243 GWh –el 40% de un reactor– y una inversión estimada que ronda los 1.147 millones. De esta cartera, hay 9 instalaciones en servicio, y solo 50 tienen la autorización administrativa de construcción. El resto aguarda en fases burocráticas más iniciales.
Entre Tarragona y las Terres de l’Ebre se contabilizan 229 proyectos solares, con una generación conjunta de 3.243 GWh
"Las plantas fotovoltaicas pequeñas, de 2 o 3 megavatios (MW), tardan más de dos años", advierte Morron, que añade que "esto es completamente inconcebible. Está fuera de la directiva europea de renovables, que es la que ha inspirado al Govern para querer declarar el interés público superior de estas energías".
Atascos y Europa
En el camino de aprobación, Morron identifica dos cuellos de botella estructurales: "El primero es la Oficina de Gestió Empresarial de la Generalitat, que puede tardar hasta un año en validar la suficiencia documental antes de publicar en el Diari Oficial de la Generalitat", relata. Este obstáculo se encuentra en el primero de los trámites a realizar.
Marta Morera: "Incorporamos medidas de agilización para reducir los plazos actuales"
"El segundo es la Comissió Territorial d’Urbanisme, que debería aprobar el Projecte d’Actuació Específica (PAE) [el penúltimo trámite] en un mes tras la declaración ambiental, pero rara vez lo cumple". "De 180 proyectos autorizados, solo 13 han cumplido este requisito en plazo", añade el consultor. Subraya que esta demora ha hecho perder oportunidades. Argumenta que la tramitación media supera los 800 días en solar fotovoltaica y es aún mayor en eólica: "Estamos muy por encima de lo que marca Europa", insiste.
Pese a la lentitud, la directora general de Energia y exdirectora del Institut Català d’Energia, Marta Morera, defiende que todavía es posible alcanzar los objetivos europeos de 2030: "Con el pla de xoc que queremos impulsar, incorporamos medidas de agilización para reducir los plazos actuales de tres años y criterios claros para que el promotor sepa desde el inicio dónde sí y dónde no se pueden implantar proyectos". La Generalitat prevé presentar un primer documento del Pla Territorial Sectorial de les Energies Renovables (PLATER) en el último trimestre de 2025, tras debatirlo con consells comarcals y ayuntamientos.
El Govern quiere presentar un nuevo decreto después de verano, con la vuelta de la temporada política
Morera también apunta a la importancia de la interconexión: "Europa recomienda un 15% y ahora estamos en un 2-3%. Debemos aumentar tanto con Francia como con el resto del Estado. Eso es muy diferente de las líneas privadas de evacuación como las de Forestalia, que eran unidireccionales. Las interconexiones son redes que permiten el flujo en ambos sentidos y son imprescindibles para un sistema robusto".
Un decreto retirado
Frente a esta situación, la Generalitat aprobó inicialmente el Decret llei 12/2025, que pretendía dar un impulso a las renovables al declararlas, junto con el almacenamiento y las infraestructuras eléctricas, de interés público superior, tal y como establece la directiva europea sobre renovables.
Eso significaba que los proyectos tendrían prioridad en la tramitación frente a otros usos del territorio. Para Morera, era un paso decisivo: "El hecho de transponerlo a la normativa catalana facilita que no se encallen según qué temas. Explicitarlo en una norma legal da seguridad al promotor".
Además, el decreto incluía medidas para agilizar pequeñas instalaciones solares en polígonos, permitir que las autorizaciones pudieran ser traspasadas en caso de problemas financieros y dar seguridad a las nuevas plantas de almacenamiento. Sin embargo, pese a la aprobación del Govern, el texto fue retirado del orden del día en el Parlament al no contar con los apoyos para convalidarlo, por lo que deberá presentarse un nuevo texto tras el verano.