Un mar a casi 30ºC, el legado del verano en la costa de Tarragona

Tarragona y las Terres de l’Ebre han vivido este verano un mar más cálido de lo habitual, con medias cercanas a los 25 grados en junio y máximas que rozaron los 29 ºC tanto en la costa tarraconense (28,8 ºC) como en aguas próximas al Delta del Ebre (28,9 ºC). Pese a estas cifras excepcionales, la temporada no ha marcado nuevos récords históricos en la zona, aunque sí ha superado con claridad los registros del año pasado.

Según los datos de Puertos del Estado e ICATMAR, la anomalía positiva se notó sobre todo en los primeros meses del verano: en Tarragona, el mar fue 2,1 ºC más cálido en junio y 1,8 ºC en julio respecto a 2024. En cambio, en agosto se enfrió medio grado en comparación con el año pasado. Una evolución similar se observó en el entorno del Delta del Ebre, donde las diferencias fueron de +1,6 ºC en junio, +1,8 ºC en julio y -1,5 ºC en agosto.

Un verano de récord en Catalunya

El conjunto del litoral catalán alcanzó una temperatura media superficial de 25,8 ºC, la segunda más alta desde 1982, solo superada por el verano de 2022 (25,85 ºC). La cifra supone 2 ºC por encima de la media climática de los últimos 40 años, que es de 23,7 ºC.

El calor se concentró especialmente en junio y julio, con los registros más elevados en cuatro décadas: 24,1 ºC en junio (casi tres más de lo habitual) y 26,73 ºC en julio, que superó el récord anterior de 2022.

Agosto, más moderado

El mes de agosto, en cambio, quedó fuera del podio de los más cálidos: la media de 26,57 ºC lo sitúa en séptimo lugar desde 1982. En 2022, 2023 y 2024, el mar superó ampliamente los 27 ºC.

Diferencias territoriales

En el balance estival, Barcelona y la Costa Brava (Estartit) sí batieron récords, con 25,7 ºC y 23,9 ºC respectivamente. Tarragona y el Ebre, pese a haber tenido un mar claramente más cálido que en 2024, no alcanzaron registros históricos.