Raquel Sans: "Votaré a Xavier Puig para que sea alcaldable de Tarragona en 2027"

Raquel Sans Guerra (Valls, 1980) es desde junio del 2024 la vicepresidenta primera del Parlament de Catalunya, el cargo institucional de mayor rango de Esquerra Republicana. Anteriormente fue la portavoz nacional de ERC. En esta conversación anuncia al Diari de Tarragona su intención de dar un paso al lado y dejar la primera línea política cuando acabe el actual mandato, a la vez que recalca su apoyo a Xavier Puig como alcaldable de Tarragona.

Empieza el curso político. ¿Cuáles deben ser las prioridades?

Obligar al PSC a cumplir con su palabra. En ERC hemos dicho desde el primer momento que esta legislatura tiene tres grandes objetivos: el cumplimiento de la amnistía; la financiación singular; y el traspaso de Rodalies.

Tras un año, ¿qué nota pondría al Govern del President Salvador Illa (PSC)?

Un 4,7. Hay muy buenas palabras e intenciones, con un tono positivo, pero faltan concreciones.

El Govern ha situado la financiación singular de Catalunya para 2028, dos años más tarde del acuerdo de investidura. ¿ERC lo avala?

Esquerra siempre ha sido un partido posibilista y realista, que tiene claro que Catalunya debe contar con los recursos que necesita para financiar sus servicios públicos. Es evidente que un traspaso de estas características no se puede hacer d’avui per demà. Como partido de gobierno, somos conscientes de las dificultades. Pero esto no quiere decir que el PSC pueda dormirse. Exigimos la máxima celeridad. Si hay movimiento, lo aceptaremos, pero si se pone una fecha sin hacer nada, no.

¿La interlocución con la consellera Alícia Romero es positiva?

Hace tiempo que ERC optó por la vía dialogada, tanto en Catalunya como en el Estado. La interlocución está, pero falta concreción. La consellera debe demostrar aún muchas cosas, más cuando ella era una diputada muy exigente cuando estaba en la oposición.

Hace pocas semanas, ERC presentó una propuesta de financiación singular en el Congreso. La ministra Montero apuesta por el ‘café para todos’.

No lo aceptaremos. Catalunya tiene una singularidad y un traspaso de competencias con unos servicios públicos que ahora están colapsados. ¿Cuándo tardan en el CAP en dar hora? Somos coherentes con lo que decimos en Catalunya y en Madrid: no solo reclamamos, sino que posem tota la carn a la graella. El PSC y el PSOE tienen un acuerdo que deben cumplir por encima de que la ministra tenga legítimas aspiraciones personales en Andalucía. Cuando hay café para todos hay injusticias para Catalunya.

La política son ciclos, y de ella una debe saber entrar y salir. Es el momento de dejar paso a nuevas personas y a nuevas ideas

¿Habrá financiación singular esta legislatura?

Deben ponerse las bases con un movimiento real y efectivo, no basta con el tono moderado del President Illa.

Entonces será necesario que Generalitat y Estado tengan presupuesto...

Sí, pero supeditado al cumplimiento de los acuerdos firmados y avalados por el PSC. Deben demostrar que cumplen, como hicimos nosotros con la investidura a contracor.

¿Negociarán las cuentas?

Si hay evidencias del cumplimiento de lo acordado, sí. Es lo que estamos pidiendo.

¿Qué sería, por ejemplo, una evidencia válida?

Pasos tangibles que todavía no han demostrado.

Jordi Turull (Junts) dice que con el dinero de los catalanes en Andalucía se desgrava el gimnasio y la mascota.

La confrontación entre comunidades no me parece el camino. Nosotros debemos reclamar lo que es nuestro y lo que nos toca, sin confrontaciones innecesarias. No es ni el tono ni las formas.

¿Estamos ante una legislatura larga? La última completa fue la de Montilla, entre 2006 y 2010.

«¿Oriol Junqueras? Tenemos una relación correcta, pero no tan intensa como cuando yo estaba en la dirección nacional»

La anterior fueron tres años... Está en manos de los socialistas, depende de ellos. Si hay acuerdo con la ley del IRPF, con la financiación singular o con el traspaso efectivo de Rodalies, el apoyo de ERC estará garantizado.

La amnistía sigue sin aplicarse.

Es el mundo al revés y es surrealista, pero debemos exigir al poder judicial que cumpla las leyes. Es una ley aprobada democráticamente y avalada por el Constitucional que debe aplicarse.

La presión a Pedro Sánchez con la imputación de Begoña Gómez empieza a ser intensa con el juez Peinado.

Tengo un dejà vu con las investigaciones prospectivas y la persecución a los independentistas en las que PSC y PSOE se pusieron de perfil, cuando hay gente que se pasó cuatro años en la prisión por subir sobre un coche.

Illa ha comprometido 800 millones en Tarragona. ¿Es el Govern que más mira al sur?

Es el gobierno que hace más titulares que afectan a Tarragona, esto sí, sin concreciones. Muchas de las propuestas vienen del Govern Aragonès, como el TramCamp o la Ciutat de Repòs.

En el primer pleno del Parlament los Comuns presentan una moción para que Tarragona renuncie al Tour si participa el equipo de Israel. ¿Cómo lo ven desde ERC?

Tenemos claro que lo que se está cometiendo en Palestina es un genocidio. Lo que está sucediendo es muy grave, Esquerra no se pondrá de perfil. Tenemos al compañero Jordi Coronas en la Flotilla.

ERC inicia el curso, de nuevo, con Oriol Junqueras. ¿Usted se siente cómoda con el nuevo proyecto después de haber apoyado a Xavier Godas?

Sí. Defendí lo que creía que era mejor para nuestra organización y para el país. Consideraba que se había agotado una etapa, pero la militancia decidió en sentido contrario. Soy disciplinada y acepto lo que se decidió. Veremos cómo somos capaces de ilusionar.

¿Qué relación tiene usted con Junqueras como cargo institucional de mayor rango de ERC?

Correcta.

¿Hablan a menudo?

«Aliança? Me hace gracia que la gente que aplaude ‘El 47’ diga que Catalunya no está preparada para más inmigración»

Antes teníamos más relación porque estaba en la dirección nacional y nos veíamos mucho más.

Junqueras preside ERC y Puigdemont Junts. ¿Seguimos en el año 2017?

Es lo que ha querido la militancia de ambos partidos. Las dos formaciones debemos ser capaces de construir ilusión de futuro.

Hoy es 1 d’Octubre. ¿Queda muy lejos el referéndum y la situación política de hace 8 años?

Sí, y me lo miro con tristeza y nostalgia. El 1 d’Octubre implicó que los partidos soberanistas fuéramos capaces de fer pinya para lograr un objetivo. Me duele ver que ahora hay tantos puentes rotos con los compañeros con los que en el pasado construimos y con los que deberemos volver a hacerlo para lograr la independencia.

¿La línea a seguir es la de la Mesa del Parlament?

Si lugar a dudas. Con el President Rull (Junts) tenemos una relación excelente, con mucho respeto institucional. Lo mismo pasa con Rosa Maria Ibarra (PSC). Es un ejemplo de cómo se puede defender la institución evitando el sectarismo.

¿La unidad independentista es un castell que hizo ‘gammes extres’ pero que ahora no puede ni construir castells de 9?

Ens falta molt d’assaig... Logramos cosas muy grandes, con las mayores manifestaciones que se han hecho en Europa en los últimos años, un referéndum que fue un ejemplo de ejercicio democrático... Ahora estamos muy lejos de ese momento. Debe aparcarse el partidismo y, con honestidad, ser conscientes de que nos necesitamos para tender puentes y avanzar en el horizonte nacional.

¿Los puentes deben ser con Aliança Catalana? Los sondeos sitúan a este partido casi a la altura de Junts y ERC.

Rotundamente, no. Con un partido fascista que promueve discursos xenófobos no debe irse ni a la esquina. Esto es una línea roja, un muro infranqueable. Estoy muy preocupada porque son capaces de conectar con las preocupaciones de la gente como hicieron los nazis hace cien años. Hitler llegó al poder democráticamente.

Hay una ola de ultraderecha. ¿Qué están haciendo mal los partidos tradicionales?

«Este sábado votaré a Xavier Puig para que sea alcaldable en 2027»

Es muy difícil de decir... Lo vemos con Trump en USA, en Argentina, en Francia, en Italia con Meloni, en Alemania... Hay un movimiento conservador que tiene mucho dinero detrás y los algoritmos de las tecnológicas. Es el discurso de la antipolítica, que se construye desde el individualismo. Debe crearse comunidad y cohesión en las sociedades, explicando que la inmigración llegará.

¿Cómo debe combatirse el discurso de Sílvia Orriols?

Me hace gracia que la gente que aplaude la película ‘El 47’ diga que Catalunya no está preparada para acoger más inmigración. Esa gente tuvo que construir chabolas y luchar para tener un autobús. Esa inmigración vino a Catalunya para buscar una vida mejor en una Catalunya que tampoco estaba preparada. Y hoy, Catalunya es lo que es por la gente que ya estaba y la que vino, como mis abuelos desde Extremadura.

¿La opción es asumir las competencias de inmigración?

Queremos asumir todas las competencias para dar respuesta a las necesidades, y que la historia de ayer de El 47 sea hoy la de El 48.

Podemos dice que se gestionarán con racismo.

Se equivocan. Queremos asumir la competencia para tener una sociedad más cohesionada, que es por lo que apuesta ERC.

¿Qué le parece la idea de Gabriel Rufián de confeccionar un frente de izquierdas plurinacional en las próximas elecciones generales?

No es la vía a seguir. Somos un partido independentista, no queremos reformar España.

ERC ha cambiado de imagen, pasando del amarillo al naranja y el beige. ¿Le gusta?

No especialmente. Soy más del amarillo, que conservarlo ya es un mensaje...

El President Pere Aragonès renuncia a la retribución de expresidente y vuelve al sector privado.

Es una renuncia muy coherente con su forma republicana de ser. Es joven y con una larga trayectoria por delante. Su padre se jubilaba y asume el negocio familiar, renunciando a las puertas giratorias.

Usted ha sido diputada, portavoz nacional de ERC y, ahora, vicepresidenta primera del Parlament de Catalunya. ¿Se ve muchos más años en primera línea política?

Garreta tiene una legítima ambición personal, pero no es una continuidad del gobierno de Pau Ricomà

No. Tengo muy claro que esta es mi última etapa. De la política uno debe saber entrar y salir. Lo he dado todo por la política institucional, pero creo que debo dar paso a nuevas personas y a nuevas ideas. La primera línea política son ciclos, y yo no me volveré a presentar.

¿Lo dejará cuándo acabe esta legislatura?

Sí. Mientras sea vicepresidenta del Parlament me dejaré la piel, pero volveré a lo que he hecho toda mi vida: trabajar en el sector privado.

El sábado hay elecciones primarias para decidir el alcaldable de ERC en Tarragona para 2027. ¿Votará?

Sí, lo tengo muy claro.

¿Por quién apuesta como candidato?

Por Xavier Puig. Representa la continuación del proyecto colectivo republicano que hemos construido entre todos. Tiene experiencia, ambición, ideales firmes y cuenta con energía nueva. Es la alternativa para plantar cara a Viñuales (PSC).

¿No le gusta Saül Garreta?

Tiene una legítima ambición personal que ha trasladado en los últimos actos, pero no es una continuidad del gobierno de Pau Ricomà ni representa la oposición excelente que está llevando a cabo el grupo municipal. Y lo que se hace bien debe dársele continuidad. Puig ha calentado muy bien por la banda para tomar el relevo de Ricomà y ser el titular. Tiene el apoyo del grupo municipal y de la ejecutiva local.

De momento, Puig ha marcado posición en la presentación de avales: 125 contra 77.

Sí, y parte en ventaja, pero será un resultado ajustado seguro.

¿Es compatible hacer frente al alcalde Viñuales y, al mismo tiempo, gobernar juntos en la Diputació como hará Xavier Puig en breve?

Es diferente y compatible. En la Diputació hay un pacto del 2023 en el que era extraño que no hubiera nadie de ERC de Tarragona.

¿Usted se ve algún día de alcaldable en Tarragona?

No. Mi futuro inmediato pasa por volver al sector privado y estar al lado de mi familia.