Economía
Coches de alta gama y urbanizaciones: estos son los municipios más ricos de Tarragona
Almoster es la localidad con la renta más alta de la provincia, por delante de Castellvell del Camp y de Altafulla

Una calle de Almoster (Baix Camp), el municipio más rico de la provincia.
Al suroeste de Reus, entre Almoster y Castellvell del Camp, es habitual ver Mercedes, BMW e incluso varios Teslas circulando. Los coches de alta gama proliferan con la misma alegría que los chalets y los adosados. «Aquí está complicado encontrar una vivienda por menos de 400.000 euros», asegura Josep Manel Sabaté, alcalde de Castellvell del Camp.
Ambos municipios del Baix Camp se disputan siempre el liderato de municipio más rico de la provincia. En esta ocasión, Almoster se lleva el premio, con una renta bruta media de 43.990 euros, superando a la localidad vecina (43.731) y a Altafulla (41.321), que cierra el cajón del privilegio.
Son los datos de la Agencia Tributaria relativos a 2023, recién publicados, en virtud de los declarantes de IRPF por localidades. «Aquí se ve mucha clase alta, hay directivos, bastantes abogados, y hay buenos pisos», cuentan en el bar Ateneu de Almoster.
El alcalde, Josep Llonch, ofrece una explicación: «La renta per cápita es muy alta porque el término municipal es pequeño y eso implica que suba. Tenemos urbanizaciones con familias de nivel adquisitivo alto, la mayoría de profesionales y algunos directivos de empresas».
Nuestros Beverly Hills responden a un patrón similar: localidades formadas en buena parte por viviendas de alto standing, con la tranquilidad y la intimidad que da el cobijo de una urbanización y a tiro de piedra de la gran ciudad. «Aquí vienen en busca de la tranquilidad de un pueblo pequeño. Estamos muy próximos a Reus y la naturaleza está muy cerca también. Intentamos que estas personas se integren en la dinámica del pueblo», dice Llonch.
Sus cuatro urbanizaciones aglutinan el 60% de la población. Lo mismo pasa en Castellvell del Camp, con siete urbanizaciones y una zona centro. «Aquí viven muchos directivos de la industria química de Tarragona, y también gente joven, con buenos empleos, que teletrabaja durante varios días a la semana», añade Sabaté.
«Aquí viven algunos directivos de empresas», dice Josep Llonch, alcalde de Almoster
Uno de los conceptos más repetidos es el de calidad de vida. «Puedes venir a vivir a una urbanización y allí estarás tranquilo, sin que te moleste nadie, con tu plaza de aparcamiento y, además, aquí estamos en las faldas de las montañas de Prades», indica Sabaté.
Fincas de un millón de euros
Esta tendencia tiene una derivada a nivel inmobiliario. Solo hay que ver el tipo de inmueble que se oferta en lugares como Almoster. Una villa de seis habitaciones por 549.000 euros, un chalet de más de 500 metros cuadrados por 685.000 y hasta varias fincas que rozan el millón de euros.
Miguel Ángel Osuna es responsable de la agencia Engel & Völkers en la Costa Daurada: «Históricamente Almoster y Castellvell han tenido rentas muy altas y nosotros lo hemos notado». Osuna define otro tipo de comprador más allá del autóctono que opta por residir en estos lugares: «Tenemos mucho cliente local pero también internacional, sobre todo de Europa, de países como Suiza, Francia o Alemania. Hay quien viene buscando por Cambrils o Salou y al final, por un tema de calidad-precio, acaban yendo más hacia el interior. Allí tienen un precio un 15 o 20% inferior y no les importa estar a 15 minutos de la playa o de la primera línea de costa».
"Hay muchos empresarios"
Montse Ferrer es responsable de SF Consulting, una consultoría con oficina en Almoster y en Castellvell del Camp: «Hay muchos empresarios viviendo aquí, que buscan algo selecto, también por la ubicación y las vistas. A veces incluso los domicilios fiscales de las empresas están aquí. Son poblaciones muy bien comunicadas y con todos los servicios».
Todo eso no significa que no haya problemas en la gestión de día a día, como indica el alcalde de Almoster: «Una cosa son los ingresos de las familias y otro el presupuesto del ayuntamiento, que va siempre justo. Hay que tener en cuenta que pese al nivel de renta, están desapareciendo muchos comercios y hay que incentivar que vengan. Tampoco hay vivienda, el pueblo no tiene dónde expandirse para construir más y lo que hay es caro».
«Las familias buscan servicios, tranquilidad y estar cerca de la naturaleza», apunta Josep Manel Sabaté, alcalde de Castellvell del Camp
Buena parte de los municipios más acaudalados del ‘top ten’ tiene una sociología similar, como afirma el sociólogo y profesor de la URV Àngel Belzunegui: «Son municipios residenciales en los que se produce una segregación territorial. Se busca un entorno natural, bien conservado, cerca de un núcleo urbano y con servicios de calidad como el sanitario o el educativo».
Otra tipología de los vecindarios acaudalados responde a aquellos con fuerte peso de la industria
Belzunegui percibe una «revalorización de estas poblaciones con su capacidad de atracción», ya que «en los últimos años han emergido pueblos muy competitivos a nivel de rentas que hace que los mayores sueldos no se concentren solo en las ciudades como hace 30 años». Els Pallaresos, El Catllar, La Secuita o Vinyols i els Arcs entran dentro de esa categoría.
Otra tipología de estos vecindarios la conforman aquellos con una fuerte huella industrial. Ascó y Vandellòs i L’Hospitalet de l’Infant, con el peso de sus nucleares, siguen generando altos ingresos tanto en sueldos como en pensiones. Lo mismo ocurre con Flix, con la histórica Ercros en su terreno. De ahí la lucha de estos municipios por seguir siendo poblaciones industriales.
Así queda configurado el 'top ten' provincial de los núcleos con familias más pudientes en su censo, con su respectiva renta bruta media:
1. Almoster (43.990 euros)
2. Castellvell del Camp (43.731)
3. Altafulla (41.321)
4. Els Pallaresos (38.749)
5. El Catllar (37.682)
6. La Secuita (35.851)
7. Cambrils (35.830)
8. Vinyols i els Arcs (35.627)
9. Ascó (35.537)
10. Vandellòs i L'Hospitalet de l'Infant (35.011)