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Durante semanas, muchos vecinos de los municipios de Perafort, El Catllar, Els Pallaresos y La Secuita han visto como sus comunicaciones telefónicas y por internet se cortaban. El origen era el continuo robo de cable. Finalmente, los Mossos d’Esquadra de la Unitat d’Investigació de la comisaría de Tarragona detuvieron el pasado domingo a un hombre de 43 años, de nacionalidad española y vecino de El Catllar, como presunto autor de un delito de robo con fuerza.
La investigación se inició a principios de marzo, cuando los mossos tuvieron conocimiento de que se habían producido una serie de cortes de cable telefónico aéreo, lo que habían provocado pérdidas con un valor de 90.000 euros.
Los robos conllevaron el corte de suministro de teléfono y datos de internet a un centenar de familias, lo que se agravó por haberse producido durante la fase de confinamiento por la emergencia sanitaria. Cabe recordar, además, que los movimientos durante marzo estaban restringidos. Asimismo, las reparaciones tardaban dos días en repararse.
A raíz de los hechos, los investigadores montaron un dispositivo porque tenían sospechas de que el autor vivía cerca de donde se producían los sabotajes.
La madrugada del domingo detuvieron in fraganti al sospechoso cuando se disponía a cortar el cable telefónico en el mismo lugar donde se habían producido la mayoría de los sabotajes. Y ello porque a pesar de la rápida intervención policial, nunca lograron observar al autor.
Un apostadero
Una de las esperas dio su fruto en la madrugada del pasado domingo. Los agentes estaban apostados en el kilómetro 6,500 de la carretera TP-2031 –de Tarragona a Santes Creus. Los mossos lograron detener al autor in fraganti.
Al día siguiente, los Mossos obtuvieron del Juzgado de Instrucción número 6 la orden de entrada y registro en el domicilio del detenido en la urbanización Monnars. En la terraza localizaron 10 metros de cable de cobre con el plástico quemado; una gran cantidad de albaranes de deixalleries en diferentes estancias de la casa a nombre de otras personas; en un habitáculo situado en la parte baja de la terraza había 30 metros de cable sin quemar. Y en un cobertizo cerrado que había en la zona de jardín había unos 200 metros de cable vacío. Dicho habitáculo fue precintando y al día siguiente la empresa propietaria acudió a retirarlo.
La parte plástica del cable era quemada en una gran barbacoa situada en la terraza principal. Allí todavía hilo de cobre con restos de cable.
Con todo el material y documentación hasta ahora intervenida, los investigadores han podido relacionar al detenido con quince robos de cable de telefonía, cometidos desde el pasado mes de marzo.
En total se ha recuperado más de un kilómetro de cable aéreo que ya ha sido reconocido por la compañía suministradora. La investigación continúa abierta y no se descartan más detenciones.
El detenido pasó ayer por la mañana a disposición del Juzgado de Guardia de Tarragona. Decretó prisión provisional eludible con el pago de una fianza de 30.000 euros. Ya había sido arrestado en once ocasiones anteriores por atentado a agentes de la autoridad, robo con violencia, búsqueda y detención, violencia de género, etc.
