«Hemos vuelto al lugar de siempre. Ha sido un viaje decepcionante», reconoció Alejandro Fernández, cabeza de lista del PP, en su esperada comparecencia. Se refería a que su partido volvía a los cuatro concejales que obtuvo la formación en las elecciones de 2007y 2003 (en 2011 llegó a 7). Fue de los últimos en dar la cara, a la espera de un ‘foto finish’ que, por último, dejó a su partido con esos cuatro concejales, aunque en algunos momentos del recuento eran sólo tres. Fernández asumió la derrota sin paliativos: «El resultado ha sido decepcionante y malo», dijo, y no quiso achacarlo ni a la irrupción de otros partidos ni a la corrupción que salpica al PPnacional.
Fernández felicitó a Josep Félix Ballesteros, para quien pidió un aplauso, y asomó que «habrá que dialogar mucho».
A pesar de las caras de preocupación que marcaron toda la jornada en la sede popular, Fernández fue recibido, y despedido, entre aplausos y vítores por los militantes que se concentraron en la sede de la Rambla Nova.