Un ejemplar de tortuga boba –la más común en la zona– apareció muerta a últimas horas de la tarde de ayer en la playa del Miracle. Debido a su estado de descomposición –llevaba varios días muerta– se desconocen las causas, aunque aparentemente no presentaba cortes ni que hubiera fallecido por algún anzuelo. Además, será imposible realizarle la necropsia.
El caparazón del reptil medía 72 centímetros de largo por 65 de ancho. Posiblemente durante la noche la marea se habrá llevado el ejemplar.
En los últimos años han sido diversos los ejemplares de tortuga boba –vivos y muertos– que han aparecido en las playas de Tarragona, donde incluso han llegado a poner huevos en la arena.