Ballesteros culpa a la oposición de que TGN se quede sin escuela británica

Jigsaw British School descarta finalmente abrir el centro en Boscos ante las trabas encontradas y se instalará en El Catllar

19 mayo 2017 20:18 | Actualizado a 21 mayo 2017 21:29
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El alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros (PSC), se ha mostrado especialmente crítico con los partidos de la oposición por el hecho de que finalmente Boscos no acoja la escuela de inglés, tras la decisión de Jigsaw British School de descartar su construcción en ese emplazamiento y marcharse finalmente a un terreno en El Catllar. «Si hubiera sido por nosotros, no habríamos perdido este centro. Era una inversión privada, pero es una gran lástima», remarcó el máximo responsable municipal.

El líder socialista ha criticado que «quien ha dicho que no quería este centro es que no se ha mirado el plan estratégico Tarragona 2022, que en el epígrafe 2011 dice que Tarragona hará una apuesta seria para la enseñanza de idiomas y, especialmente, para educación en inglés, que es una de las carencias que en el plan estratégico señalaba como necesidad. Estábamos construyendo aquello que habíamos acordado», ha remarcado el alcalde. En clave del nuevo pacto de gobierno con PP y Unió, Ballesteros ha indicado que «si fuera por nosotros tres, y también por CDC, esta escuela no se habría ido de ninguna de las formas. Otros partidos han priorizado intereses estratégicos y partidistas a la ciudad de Tarragona».

 

‘Demora en el procedimiento’

Por su parte, la portavoz del equipo de gobierno, Begoña Floria, ha lamentado «profundamente» que la ciudad se haya quedado sin escuela británica. «Cuesta entender determinadas actitudes», ha añadaido, y ha dejado claro que «el equipo de gobierno ha hecho todo lo posible para que fuera una realidad». Respecto a si el consistorio mantiene la idea de destinar ese solar a una escuela británica –al concurso se había presentado otra empresa interesada–, Floria ha reconocido que estudian descartar el proyecto y cerrar el expediente, ya que esa otra empresa «se encontraría con la misma situación» que ha llevado a Jigsaw a irse.

En concreto, la empresa ha justificado su decisión de rendirse en Boscos y apostar por El Catllar por los obstáculos que se estaba encontrando para avanzar en el proyecto, como la citada oposición de algunos partidos y también de los vecinos, que amenazaban incluso con llevar el asunto a los tribunales. Todo ello podía provocar una «demora en el tiempo» que comprometía la intención de iniciar las clases el próximo septiembre», ha explicado este viernes Jigsaw en un comunicado. Pese al cambio de emplazamiento, la empresa asegura en el mismo texto que mantiene la intención de abrir en septiembre en El Catllar.

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