La llamada al 112 entró a las 22.14 horas. La familia pedía ayuda porque tenía a su hijo atrapado en la cama. Para ser precisos, se le había quedado el pie dentro del plegatín y ante el temor de hacerle daño en la pierna se pedía ayuda.
La operadora activó a Bombers, que desplazó a la vivienda una dotación para poder echar una mano. Los bomberos accedieron a la habitación del pequeño y con precisión y cuidado en 30 minutos liberaron el pie del menor, que no tuvo que ser atendido.
La familia agradeció a los bomberos la ayuda, que se retiraron poco después de las 23 horas de este domingo. Ha sido la noticia anecdótica del fin de semana.