Cinco accidentes con ocho víctimas en el último año por buscar vías alternativas al Coll de Lilla

Mientras las obras de la A-27 en el tramo entre Valls y Montblanc siguen sin avanzar definitivamente, la querella que presentó el alcalde de la Vila Ducal, Josep Andreu, sigue adelante. Andreu acudió el pasado 29 de julio al juzgado de Valls, donde presentó una denuncia contra diversos altos  cargos del Ministerio de Fomento a raíz de los accidentes mortales en carreteras de este radio que relacionó con la aturada de las obras de la autovía A-27.

Andreu asegura que «no hemos obtenido ninguna respuesta por parte del juez, de forma que debe seguir adelante». En concreto, el escrito del alcalde se dirigía contra Lluís Bonet, jefe de la demarcación de Carreteras del Estado en Catalunya, y contra Ramon Juanola, encargado del área de Planeamiento, Proyectos y Obras del Ministerio de Fomento. Según la denuncia, el retraso en el tramo del túnel del Coll de Lilla provoca que el tráfico pesado tenga que optar por vías alternativas que no están preparadas por este tipo de vehículos. Esto ha incrementado notablemente la siniestralidad en estas carreteras secundarias. Especialmente en la C-37, entre Valls y Alcover, y la carretera C-14, entre Alcover y Montblanc. Entre las dos, desde mitades del año pasado, se han registrado cinco accidentes graves con ocho víctimas mortales. Es un dato que ponía de manifiesto hace unos días el concejal del Ayuntamiento de Valls, Martí Barberà, quien lidera junto al alcalde de Montblanc, Josep Andreu, el frente común para desencallar este proyecto.

Montblanc convocará nuevas movilizaciones si no se aprueba el proyecto este año

Andreu ya ha avanzado que en la fase de alegaciones de la modificación del proyecto, los ayuntamientos no van a poner palos en las ruedas. «No queremos que haya la mínima sospecha de que si las obras no avanzan sea por culpa nuestra», decía el edil republicano. Defiende la importancia de culminar este proyecto, que «es clave para la economía de nuestra comarca». Por ello ya ha avanzado que «si a finales de año no han aprobado la modificación del proyecto por parte del Consejo de Estado, vamos a convocar manifestaciones de nuevo». La última movilización fue el pasado verano.