Clausuran dos pozos de agua en Vilallonga del Camp por contaminación

Vilallonga del Camp ha cerrado el grifo al agua procedente de los dos pozos con que cuenta el municipio. El origen es un problema de contaminación que sufren ambos, situados muy cerca de la riera de La Selva, donde este municipio vierte las aguas procedentes de la depuradora, la cual no puede tratar todo el caudal que le llega debido a que ha quedado pequeña ante el aumento de la población. Mientras, los vecinos de Vilallonga están consumiendo actualmente solo el agua procedente del Consorci d’Aigües de Tarragona. 

El problema de Vilallonga del Camp con el agua que les llega a través de la riera de la Selva no es nuevo. Desde su construcción en el año 1980, las aguas supuestamente tratadas por la depuradora del municipio del Baix Camp se vierten a la dicha riera. Lo que fue un equipamiento modélico en su época, se ha convertido en desfasado con el cambio de siglo al no poder tratar todas las aguas residuales que le llegaban. 

Los dos pozos municipales que tiene Vilallonga se encuentran a medio camino entre los dos municipios, a unos 30 metros de la riera. El agua captada por los mismos se envía a los depósitos a través de una bomba. Hasta allí llega también la del minitrasvase, de la que el municipio tiene una concesión fija mensualmente.

El precedente
Hace unos años ya hubo problemas de contaminación de la riera, pero fueron esporádicos y la situación parecía que se había subsanado. Pero a finales del año pasado, los episodios volvieron, provocando las quejas vecinales por malos olores. El detonante de esta situación llegó la semana pasada, cuando se tuvieron los resultados de unas analíticas encargadas por el propio Ayuntamiento. 

La próxima semana  se conocerán los resultados de las nuevas analíticas 

Uno de los parámetros que se tienen en cuenta para determinar que el agua es potable es el TOC –carbono orgánico total–, la cantidad de carbono unido a un compuesto orgánico. El índice era superior al límite establecido.

Como medida preventiva –a pesar de que dicha agua podría pasar a ser potable una vez tratada en los depósitos–, el Ayuntamiento decidió cortar el suministro desde los dos pozos, una circunstancia que se  ha producido en otras ocasiones, aunque no por dicho motivo. Se quiere saber si se trata de una circunstancia puntual o bien es persistente a lo largo del tiempo. Para la próxima semana se espera conocer los resultados de nuevas muestras. 

Por otra parte, el Consistorio ha solicitado al Departament de Salut de la Generalitat un informe sobre si dicha contaminación tiene alguna relación con la de la riera. 

Pendientes de la nueva EDAR
Durante la reunión de la semana pasada entre las diferentes partes implicadas en el tema y los vecinos de Vilallonga del Camp se puso de manifiesto que la contaminación de la riera llegará a su fin el segundo semestre de este año con la puesta en funcionamiento de la nueva estación depuradora de aguas residuales de La Selva del Camp –situada al lado de la actual–, que multiplicará por cuatro la capacidad de tratar las aguas. Su construcción se solicitó ya a principios de siglo, pero los problemas presupuestarios del Agència Catalana de l’Aigua (ACA) hicieron retrasar su construcción. 

La estructura de la nueva estación está prácticamente terminada y ya se han certificado 1,5 millones de euros de los 3.125.000 por los que fue adjudicaba la obra. Se prevé que esté terminada en dentro de dos meses, aunque tardará todavía algunos más en entrar en funcionamiento. 

El Ayuntamiento de Vilallonga del Camp tiene previsto emitir hoy un comunicado sobre la situación creada.