Colores de quita y pon en las uñas

Tendencias. Especialistas advierten de que el esmalte permanente puede debilitar la uña y hacerla más frágil

09 julio 2019 10:41 | Actualizado a 10 julio 2019 07:44
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Temas:

Las uñas también visten a la moda. Diseños originales y coloridos, pigmentos exóticos e incluso a juego con la línea de ropa y sandalias. Esmaltes permanentes, impolutos durante semanas y hasta meses. Sin embargo, ¿es sano colorearlas y olvidarse de ellas hasta finales de la época estival? Los profesionales de la salud no lo recomiendan, especialmente en los pies.

La podóloga tarraconense Lídia Rodríguez se declara «totalmente a favor de pintarlas. Quedan mucho más bonitas, sobre todo en verano con las sandalias», aunque con matices. En este sentido, esta profesional que visita en Sanitas Tarragona, en el centro Médico Milenium Imperial Tarraco, explica que «las de las manos se despintan porque se utilizan más. Vestirnos, lavar platos, hacer la cama, en el trabajo... por lo que unas de gel o esmalte permanente duran mucho. Sin embargo, en los pies no se suelen despintar por lo que considero innecesaria una pintura permanente».

Infección por hongos

Pero más allá de este apunte práctico, Lídia puntualiza que decorarlas con pinturas permanentes conlleva tocar la uña, lo que presenta algunas consecuencias. «Primero se lima, después se pinta. Si se tiene una uña normal, al afinarla se provoca que se rompa». Del mismo modo, esta especialista llama la atención sobre el establecimiento escogido para tal efecto. «No todos disponen de los materiales de esterilización adecuados». ¿Qué consecuencias puede tener esto para la salud?

«Si una uña infectada se tapa un mes, dos o todo el verano, el problema persiste»

«Si una persona tiene una infección por hongos y no se utiliza material esterilizado, el siguiente cliente también puede infectarse y así sucesivamente. Y si además las tapamos un mes, dos o todo el verano, el problema persiste y se debe tratar. Este es uno de los motivos por lo que las uñas de gel no son muy recomendables», aclara. Asimismo, aconseja prestar especial atención a la cutícula. «Nos sirve de protección y cuando se levanta para hacer la pedicura se convierte en una puerta de entrada de hongos, de infecciones». Y una uña enferma puede contagiar a las demás

Precisamente los hongos y unas uñas rompedizas son los principales problemas que pueden presentar. En el primer caso, «si la infección es pequeña, se puede solucionar con antifungis tópicos. Pero si es grande y ocupa más de la mitad de la uña o ha llegado a la matriz se debe dar medicación oral. Y los antifugis orales son bastante agresivos, afectan al hígado y hay pacientes que no los pueden tomar». 

Esmaltes al margen, las personas que utilizan botas de seguridad, corredores y jugadores de pádel son algunos de los que más sufren de uñas. «Los corredores sobre todo en las bajadas. En pádel en los cambios de dirección. En ambos casos el pie se desplaza hacia adelante y va tocando la punta del calzado. Es importante llevarlas bien cortas así como una zapatilla ajustada y apretada en el tobillo. De esta manera se evita dañarlas», señala.

En definitiva, «pintarlas solo los meses de verano, lo justo y necesario con esmalte de quita y pon.  Y si surge un problema, acudir al especialista. Un calzado que recoja el pie y, como en el resto del cuerpo, mucha crema hidratante. Es cuestión de cuidarlas mucho, que nos tienen que durar muchos años», asevera.

Comentarios
Multimedia Diari