Compras de Navidad más pequeñas y en el último momento

El marisco y el pescado e Tarragona son algunos de los productos del Mercat Central que han subido más de precio. Sus vendedores son optimistas a pesar de lo insólito de esta campaña

19 diciembre 2020 20:00 | Actualizado a 20 diciembre 2020 07:11
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Será una Navidad completamente atípica con celebraciones de mínimos. Y esto se ha notado en la cesta de la compra, que este año tiene que adaptarse a las restricciones de aforo, que han fijado las autoridades y que no permiten las reuniones de más de diez personas. «En Nochebuena normalmente éramos veinte personas y el día de Navidad unas quince. Este año no. Seremos seis y seis», decía Michaela Herrera. Esto se ha traducido en compras más pequeñas y, en la mayoría de los casos en el último momento, ya que la mayoría de las familias se han esperado hasta el último momento para poder organizarse.

Herrera como todos los sábados ayer fue al Mercat Central. A primera hora de la mañana aprovechaba para hacer las últimas compras e intentar evitar las aglomeraciones que marcan el calendario. «En una situación normal, hoy estaría a reventar», decía. Ayer no lo estaba. Sin embargo, muchos de los clientes habituales madrugaron más de lo común y esto se notó con una buena afluencia de público desde que el edificio de la Plaça Corsini abrió sus puertas a las 8.30 horas de la mañana.

Los protocolos que establecen las autoridades sanitarias obligan a controlar el aforo. De esto se encarga el personal de la Fundació Topromi que, ubicado en cada uno de los accesos, cuenta con un marcador que registra las entradas y salidas, para que no se superen los límites. «Si es necesario, tendremos que decirles que se esperen un poquito y habrá que hacer una cola», decía Albert Plana.

Los que están trabajando más intensamente estos días son los paradistas de la carne y todos aquellos productos, como los quesos, que servirán como aperitivos. «Las ventas son muy distintas, porque serán menos y aún hay muchos indecisos que están a la expectativa y no saben qué van a hacer», apuntaba Meritxell Pomerol. Asegura que esto se ha notado especialmente en los encargos que en otros años recibían con bastante tiempo de antelación. Este año no la ha habido. No obstante, Pomerol apuntaba que el nivel de ventas ha sido similar al de otros años. A sido gracias a jornadas maratonianas que suponen que muchos de los paradistas se ponen a trabajar a las seis de la mañana y no se marchan a casa hasta las 21.30 de la noche, cuando el mercado cierra sus puertas. «Ya lo sabemos de todos los años. Los días antes de Navidad es cuando más se trabaja», decía.

Rosa Belchi, de la Peixateria Rosa, también coincidía en que «no hemos notado mucha diferencia respecto al año pasado. La gente compra igual, aunque dude y, en todo caso, ya te dicen que irá para el congelador». Habitualmente el pescado se compra antes, ya que en los últimos días los precios siempre suben. Lo único que se deja para el último momento es el marisco y este año será más caro de lo habitual. «El pescado de Tarragona va más caro, porque no hay mucha cantidad, pero a quien le gusta, comprará menos, pero lo paga igual», decía.

El rape, la dorada y las gambas son algunos de los productos estrella. Y, entre los manjares más selectos, un año más está la gamba de Tarragona que ha superado los cien euros al kilo. «No hay mucha y se nota», decía Maria Caparrós Pons, de la pescadería Peix Tinet. Esta lamentaba que el Govern no se pronunciara hasta el viernes para anunciar las nuevas medidas. «No se han explicado las cosas de forma coherente y la gente no sabe qué hacer», decía.

Esta semana la OCU daba a conocer la segunda encuesta de precios para esta Navidad, en la que se apuntaba que desde el 25 de noviembre (cuando se hizo la primera encuesta) hasta después del puente de la Constitución estos habían subido de media un 1%. Se trata de la menor subida de los últimos años, situándose de media un 4,1% más bajos respecto al mismo periodo del año pasado. Sin embargo, no todos los productos se han comportado de la misma forma. Los que más han subido son las almejas (19%), el besugo (17%) y la merluza (13%). Por el contrario, los que más bajan son la pularda (-29%) las angulas (-7%) y el redondo de ternera (-5%).

Maria Caparrós aseguraba que «no serán unas Navidades ni mejores ni peores, simplemente diferentes». Y esto se nota en el momento de hacer una cesta de la compra en el que todo el mundo va improvisando según las circunstancias. Un problema que Mari Cruz Soto y Conchi Campaña se han tomado con filosofía. «Nosotros seremos cuatro o cinco, los mismos que todos los años, y lo tenemos muy claro si se puede hacer bien y sino irá todo al congelador», apuntaba la hija.

Ayer supuso un punto de inflexión en cuanto a la afluencia y se espera que a partir de mañana y hasta el mismo jueves al mediodía, el ritmo será intenso. Entre lo que siempre se deja para el último momento está la compra de la fruta y la verdura. «De momento nosotros nos lo miramos, porque al no poderse congelar la gente se espera», decía Ivan Palau, de La Filla del Patró. De momento, su trabajo consiste en coger los pedidos que atiende tanto a través del teléfono como on-line. «La gente se asegura de no quedarse sin género», decía. Algunos de los productos más solicitados son frutas como los lichis, las fresas, las naranjas y las cerezas, que este año han contenido su precio y pueden adquirirse a 22 euros al kilo.

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