'Debemos crear vocaciones turísticas en el territorio'

¿Qué retos afrontará en esta nueva etapa que inicia la Associació de Càmpings?
Una de las líneas importantes será la profesionalización de una asociación que lleva 40 años y que tan solo hace ocho años incorporó a una persona que asumió la secretaria técnica. Junto con la promoción, será uno de los ejes.  

¿A qué se refiere cuando habla de más promoción?
A consolidar los 200.000 euros de la partida que tenemos en el presupuesto para este concepto. Cuando hablamos de los retos también incluimos la necesidad de estar muy atentos a todas las modificaciones legislativas que nos afectan, por ello hemos creado una comisión específica.

Renovarse pasa por innovar y por ello hace falta el contacto permanente con la formación.
Tenemos la gran suerte de trabajar en colaboración con tres entidades reconocidas internacionalmente como son la Escola d’Hosteleria, la Facultat de Turisme i Geografia y el Observatori de Turisme de la Costa Daurada. Ahora hay que dar continuidad a esta relación y que sea más fluida. 

«Han pasado cinco años, aún no hay tercer carril y no hemos pensado en una alternativa.  Deberíamos reflexionar todos sobre esto»

¿Tiene que ver con esta profesionalización?
Sí, claro que sí. Pero también es cierto que se está llevando a cabo un relevo generacional en unos negocios familiares en los que se abre camino una nueva generación con un enfoque muy nuevo y más profesional. Pero, más allá, debemos ver que la relación con los centros de conocimiento es clave para crear vocaciones turísticas. Convencer a los que viven cerca de casa de que el turismo es una muy buena opción para dedicarse en su futuro profesional.

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Y una última comisión es la de infraestructuras. Algunos compañeros lo trataban de forma espontánea y los incorporamos para hablar de trenes, pero también de carreteras y del futuro de las autopistas, ya que están a punto de acabarse sus concesiones y no deben renovarse. 

¿El sector será proactivo con las demandas del territorio?
Sí. El turismo quiere que la gente sea feliz cuando venga a casa y tenemos muy claro que esto implica que el entorno sea agradable, beneficiando a los locales. 

Que el tercer carril no haya tirado adelante, ¿da margen para reconsiderar el proyecto?
Me gustaría, pero la decisión que sea debería tomarse con todos los sectores del territorio. Han pasado cinco años, aún no tenemos tercer carril y no hemos pensado en la alternativa, deberíamos reflexionar todos sobre esto. 

¿Se han perdido cinco años?
Sí. Es responsabilidad de todos que no hayamos exigido durante todo este tiempo que se hiciera un proyecto. 

«Los Juegos de 2018 pueden dejarnos una plataforma en cuanto a instalaciones deportivas que contribuya a la desestacionalización»

¿Tarragona se precipitó cuando aceptó el tercer carril o lo atribuye al contexto económico del momento?
Entiendo que la coyuntura económica hizo que se viera como una solución más factible.  

¿El déficit en infraestructuras está perjudicando al sector?
La ausencia de la A-27, con las colas de La Riba, y que las autopistas sean de pago no facilitan el bienestar al que deberíamos aspirar.

¿Les resigna que el sector privado se renueve constantemente y el esfuerzo no se vea compensado por una mejora de lo público?
Nos preocupa porque cada vez estamos competiendo de una forma más exigente con otros destinos turísticos. Si países como Turquía y Grecia vuelven a recuperar cuota de mercado estaremos en una situación de debilidad.

¿Qué esperan de cara al año que viene?
Las previsiones son muy buenas. El año pasado ya lo fue, pero además muchos de los clientes se fueron con las reservas hechas. 

¿Creen que les afectará la situación política?
La temporada en el sector del cámping empieza dentro de cinco meses, pero está claro que la incertidumbre no favorece a nadie. 

¿Campings y desestacionalización es compatible?
Se están haciendo actividades y trabajando mercados concretos para conseguirlo. Uno de los primeros retos sería conseguir que de Semana Santa a Tots Sants la ocupación también fuera muy elevada. A partir de aquí que cada empresario decida su activo.

¿Pasa por la especialización?
Pasa por buscar nichos que no son el familiar. Y aquí está tanto el deporte como el business, sin olvidarnos de PortAventura, que debe ser nuestro gran cómplice.

¿Y el Hard Rock Entertainment World?
Los casinos no son un atractivo para nuestros clientes, pero una zona comercial o una oferta lúdica potente y sostenida puede ayudarnos. Debemos ser realistas, nunca conseguiremos las ocupaciones de verano, pero la herencia de los Juegos Mediterráneos creará una plataforma que puede ayudarnos.

¿Cree que tendrán una influencia?
Con una gestión correcta, sí.

Con el modelo sol y playa agotándose, ¿hacia dónde debe reorientarse el sector?
Hay una conversión del sol y playa al turismo litoral, a disfrutar de todo lo que sucede alrededor. Depende de nosotros crear una oferta interesante adaptada al bolsillo de cada cliente. Dentro de cada establecimiento cada uno nos hemos adaptado muchísimo y no tan solo en lo que se refiere a las instalaciones, sino también en cuanto al personal. 

¿El ‘glamping’?
Sí. Es cierto que los campings hemos tenido la suerte de mantenernos en espacios preferentes, pero también se han transformado las instalaciones completamente, con parcelas más amplias y más prestaciones. Y después la parte más vinculada al resort. Seguramente no hemos sabido explicar lo suficientemente bien lo que significa el mundo del cámping para el territorio.