¿Depresión o nerviosismo? El dilema de la pandemia

No se termina de tener claro si la pandemia provocada por el coronavirus y que lleva soportando la sociedad desde hace ya varios meses ha generado un aumento de los problemas mentales.

Muchos estudios defienden que las depresiones y los episodios de ansiedad se han multiplicado de manera alarmante desde la irrupción del coronavirus, mientras que otros defienden que el número sigue siendo igual, aunque reconocen que el ser humano tiende a estar más nervioso en situaciones desconocidas y de estrés como se están viviendo en estos momentos. 

Jaume Descarrega, vocal y referente de la Comissió de Cultura del Col·legi Oficial de Psicologia de Catalunya, confirma que la pandemia está afectando a la salud mental de las personas, pero que no hay que ser «castastróficos». «Yo diría que afectar es evidente que ha afectado, pero como cualquier situación traumática, así que la afectación emocional existe. Hemos perdido nuestro estilo de vida que nos daba una seguridad», explica el psicólogo. La pandemia nos ha afectado a nivel corporal y a todos los niveles». Además, añade que «la situación biológica desencadena un tsunami social y emocional. Dependerá de la situación de cada uno para poder volver a la normalidad una vez pase todo esto».

Descarrega asegura que el paso de los meses y que no exista vuelta a la normalidad solo provoca que las personas estén cada vez menos optimistas: «Ahora mismo estamos preocupados por no contagiarnos y si lo hacemos que no sea de manera terrible y afecte a nuestro entorno. Nuestro estado emocional se va agotando, ya que no ve salida posible, ahora mismo no vemos un camino, sino que observamos una curva sin fin».

En todo caso, el psicólogo tarraconense recalca que hay que valorar cada caso por separado y que no se puede generalizar: «Hay que valorar cada caso por separado, ya que todo depende de muchos aspectos. Una persona que tiene problemas en el trabajo, con la familia, con la vivienda, de salud… pues tiene muchos más números de generar un malestar constante y pronunciado que agravado por la pandemia pueda desembocar en un trastorno mental que quizás ya antes existía».  

No obstante, Descarrega confirma que el aumento del servicio de salud mental es un hecho, tal y como avalan los datos oficiales: «Los estudios de la OMS advierten de que la pandemia ha aumentado las demandas de salud mental. La gente está más preocupada y ha cambiado su conducta, pero no hay que ser catastrofistas», insiste.

Por último, el miembro del Col·legi Oficial de Psicologia de Catalunya recalca que situaciones como las generadas por la pandemia del coronavirus deben servir para tomar más en serio la salud mental: «Es fundamental que esta crisis permita darle la importante real que tiene la salud mental. Hasta ahora no se ha considerado con la importancia que debería y se tiene que invertir más».