Máximo despliegue policial el domingo por la mañana en la estación de Adif de Tarragona ante el aviso de que un hombre que iba en el Talgo Barcelona-Sevilla iba amenazando a los pasajeros con una navaja. Tras recibirse el aviso, agentes de Seguretat Ciutadana así como del Àrea Regional de Recursos Operatius (ARRO) acudieron a la estación esperando a que llegara el tren, sobre las diez y media de la mañana.
Cuando el convoy paró, los agentes se entrevistaron con el interventor, quien negó que el hombre estuviera amenazando con una navaja a los pasajeros. Afirmó, sin embarga, que había discutido con el sospechoso, quien al parecer se encontraba en estado ebrio. Sí que reconoció que había sacado una navaja antes, pero para abrir una botella. Después de comprobar que todo había sido una confusión, el tren continuó su recorrido hacia Sevilla.