El sábado debía ser un día de alegría, pero terminó con un regusto a impotencia y rabia. Una familia de Els Pallaresos se encontró pasadas las 21 horas la casa patas arriba y con la ausencia de joyas y dinero en efectivo valorado todo en unos cuantos miles de euros.
La familia salió de su adosado situado en la avenida Prat de Motlló, a pocos metros del consultorio médico de la localidad, y se marchó a celebrar el cumpleaños de una de las dos hijas. El matrimonio cerró la puerta y arrancó el vehículo rumbo a la fiesta de aniversario que tenían por delante.
A la vuelta, las marcas en la puerta principal borró la sonrisa del matrimonio. La puerta no estaba abierta, pero la ventana de la cocina sí habían logrado forzarla y abrirla.
Al entrar en la casa, las sospechas de un robo se confirmaron. La madre llevó a las dos hijas a casa de la vecina para evitar darles más información de la debida.
Mientras se oteaban las habitaciones, el matrimonio llamó al 112. Y alertó a Mossos d'Esquadra de lo ocurrido. Antes había llamado a los vigilantes municipales de Els Pallaresos, sin que el móvil diera señal de llamada.
La patrulla de la policía autonómica llegó una hora más tarde y certificó que había sido un robo con fuerza consumado. Los ladrones se dedicaron a rebuscar en toda la casa joyas y dinero, perdiendo todo el interés en los electrodomésticos, televisores e incluso algún móvil.
Tras presentar la denuncia correspondiente, el domingo volvió la unidad científica de Mossos para recabar huellas e indicios. Sin embargo, no hubo suerte. Los ladrones entraron con guantes y no se los quitaron en ningún momento.
El robo en esta casa de Els Pallaresos no es el primero de la urbanización Jardins Imperi. De hecho hace unos días hubo otro similar: los propietarios se ausentan y los ladrones entrar en la casa sin temor a encontrarse de frente con los titulares.
Roban dinero y joyas de un adosado en Els Pallaresos
La rutina de un matrimonio de Els Pallaresos, que reside en un adosado de la avenida Onze de Setembre, permitió a los ladrones entrar de forma segura en su vivienda este miércoles por la tarde. Los autores accedieron rompiendo el cristal de la puerta principal y tuvieron más de tres horas para registrar cada una de las dependencias de la casa.
La misma pareja también ha explicado que el suyo es otro de los robos que se han empezado a detectar en esta localidad del Tarragonès. "La gente tiene miedo y nos falta vigilancia. Ojalá la difusión de lo que nos ha ocurrido sirva para que aumente la vigilancia y se pueda vivir tranquilo en esta urbanización", explican.