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La Guàrdia Urbana ha detenido, en operaciones diferentes, a dos jóvenes por su presunta implicación en la venta de sustancias estupefacientes en la Plaça dels Infants de Tarragona. La intervención de los agentes de la Unitat de Delinqüència Urbana (UDU) vino a raíz de las quejas de las asociaciones vecinales de la zona de que en dicho espacio se consumen sustancias estupefacientes por parte de grupos de jóvenes, principalmente por la tarde. Por ello, en las últimas semanas han realizado vigilancias para detectar a los presuntos compradores.
Los agentes detectaron la gran afluencia de jóvenes en un domicilio de la calle Reial. Accedían al interior, donde permanecían poco tiempo y posteriormente consumían la droga en la Plaça dels Infants.
Poco antes de las ocho de la tarde del pasado 19 de abril, los guardias vieron a un joven que llamaba al timbre de la vivienda, de donde salió un individuo de aspecto marroquí por la ventana y le lanzó un envoltorio. Los guardias siguieron al receptor y lo pararon en la calle Smith. Le encontraron marihuana y fue denunciado administrativamente. En días posteriores los policías multaron a otros compradores que habían acudido al domicilio de la calle Reial.
El pasado lunes, los agentes vieron un vehículo estacionado en la parada de autobús delante del edificio de la calle Reial. Poco después salió de la vivienda el sospechoso y subió al vehículo. Éste fue parado por la patrulla en la avenida Vidal i Barraquer. En su interior estaba Mohammed M., quien llevaba marihuana, por lo que fue multado.
A las seis y cuarto del día siguiente los agentes vieron al mismo sospechoso que salía de su casa en dirección a la calle Lleó, encontrándose con un joven. Éste le dio un billete de diez euros y recibió a cambio un envoltorio de aluminio. Con posterioridad se comprobó que era marihuana. Ante ello, los guardias detuvieron a Mohammed M. Le encontraron 204 euros en efectivo.
Segunda intervención
Poco antes de las ocho de la tarde del pasado miércoles los agentes volvieron a la Plaça dels Infants. Vieron a un joven marroquí en la parada del autobús. Se le acercó un turismo, el peatón se sentó en el asiento del copiloto y entregó al conductor unos billetes y, a cambio, recibió tres envoltorios.
El supuesto comprador bajó del coche y fue parado por los agentes en la calle Zamenhoff, donde comprobaron que llevaba los tres envoltorios con un polvo blanco. Otro agente siguió el vehículo hasta la avenida de Catalunya. Cuando su conductor bajó de él quedó detenido. Se trata de Miguel R.B.. Llevaba un envoltorio con una sustancia blanca y dinero.
