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Pau Ricomà (ERC) y Carla Aguilar Cunill (En Comú Podem) han hecho el apretón de manos de manos esta tarde de viernes que sella el acuerdo al cuando han llegado sus formaciones para formar un pacto de gobierno a Tarragona que pondrá fin a doce años de mandato del PSC y del alcalde Josep Fèlix Ballesteros.
En un encuentro a la Antiga Audiència, han expuesto los trece puntos del acuerdo programático que permitirán que este sábado Pau Ricomà se convierta en el alcalde de la ciudad, también con el apoyo en la investidura de Junts per Tarragona y la CUP, que por ahora no entrarán al gobierno municipal.
También han informado del nuevo cartapacio municipal, formado por seis grandes áreas: presidencia, territorio y sostenibilidad, servicios generales y gobierno abierto, ciudadanía, desarrollo económico y educación.
Ricomà ha señalado que el primero que quieren hacer es “saber como está cada cosa” con el fin “de parar una decadencia urbana manifiesta” del espacio y equipaciones públicas. Ha hablado de coser, rehabilitando y regenerar la ciudad.
Incluso haciendo una auditoría de cada ámbito. Aguilar ha destacado que impulsarán “una política más honesta, más próxima a la ciudadanía y más enfocada a la política pequeña, la del día a día”.
El primer punto del acuerdo programático es el “compromiso en defensa de la convivencia, la pluralidad democrática, los valores republicanos, las libertades civiles y democráticas y la memoria histórica”.
Seguidamente se habla de la organización de la ciudad en ‘consejos de distrito’, que tienen que ser “el instrumento formal y estable de participación ciudadana y de descentralización de la toma de decisiones”. Esta tarea lo asumirá la republicana Paula Varas.
El área de presidencia la dirigirá Pau Ricomà, que asumirá también las conselleries de Cultura i Festes. Urbanismo será para uno de los hombres fuertes de ERC, Xavier Puig, que coordinará la macroàrea de Territorio y Sostenibilidad.
En lo que respecta a equipaciones, el acuerdo habla de recuperar el Banc de España para hacer un centro cívico, así como estudiar propuestas de futuro para el Fortí de la Reina, el edificio municipal de la plaza Imperial Tàrraco, la Tabacalera o el Preventori de la Savinosa.
Otro miembro importante de los republicanos, Jordi Fortuny, asumirá la vertiente económica del Ayuntamiento dirigiendo el área de Servicios Generales y Govern Obert.
Protagonismo para los Comuns
Para los Comuns queda la vertiente más social. Carla Aguilar Cunill coordinará el área de ciudadanía y asumirá la conselleria de Serveis Sociales, pero también las tareas vinculadas con el feminismo y LGTBIQ+, una cuestión que llevaban a su programa electoral.
Se trata de una área que tendrá mucho peso en el gobierno, según han asegurado, y que prevé en el acuerdo programático “fiero de la lucha contra cualquier tipo de discriminación una prioridad del Ayuntamiento”.
En el área de ciudadanía también se incluye Vivienda, que asumirá el otro regidor de ECP, Herman Pinedo. Entre los aspectos a desarrollar hay las medidas contra la emergencia habitacional, incrementar el IBI en los pisos vacíos y a los grandes poseedores o realizar un censo de pisos vacíos.
Otra consellería que en los últimos año ha cogido protagonismo a Tarragona es la de Turismo, que se quedará la republicana Laura Castel, que coordinará el área de Desarrollo Económico. Mary López lo acompañará a Comerç y Esports. Finalmente, el área de Educació será para Manel Castaño, que dirigirá Seguretat Ciutadana y Protección Civil.
Posible entrada de la CUP
Ricomà y Aguilar no han descartado que en el futuro la CUP entre en el gobierno. “No tenemos ningún inconveniente al hablarlo, todo el que se haga se irá decidiendo en conjunto”, ha expuesto el futuro alcalde.
