El Ayuntamiento comunica al Nàstic que se desprenderá de todas sus acciones de la SAD

El Consistorio tiene el 14% de los títulos de la Sociedad Anónima Deportiva y anuncia un plan a medio plazo para dejar a cero su participación. Ambas partes se reunirán a finales de enero

29 diciembre 2019 20:00 | Actualizado a 16 febrero 2020 16:27
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El Ayuntamiento de Tarragona planea desprenderse «a medio plazo» de todas sus acciones de la Sociedad Anónima Deportiva (SAD) del Gimnàstic. Así lo asegura al Diari el concejal de Hisenda, Jordi Fortuny (ERC), quien considera que el Consistorio tarraconense «no hace nada» en el accionariado grana. Actualmente, la administración pública municipal cuenta con el 14% de los títulos de la SAD, una cifra que –según relata Fortuny– «debe tender a cero».

De hecho, según ha podido saber este periódico, el Consistorio ya ha comunicado al club grana sus intenciones y, según indica el presidente del Nàstic –Josep Maria Andreu–, habrá una nueva reunión a finales del mes de enero para concretar el calendario y el proceso a seguir. «Ya lo hablamos hace un par de meses y, si es lo que quieren, no habrá problema. La relación es buena y no pondremos ningún tipo de obstáculo», afirma el máximo dirigente del club de la Budellera. En este encuentro también se abordará la inversión que el Nàstic realizará en el Anillo Mediterráneo de Campclar, que está a la espera de que se apruebe definitivamente el plan para reordenar el entorno del Nou Estadi, donde los grana tienen previsto vender terrenos.

Del 48% al 14% actual

Lo cierto es que la participación del Consistorio en el accionariado grana ha disminuido considerablemente a lo largo de los últimos años. El julio de 2002, el Ayuntamiento aportó el 48% del capital social cuando se constituyó la nueva SAD, invirtiendo 960.000 euros de los dos millones requeridos por el Consejo Superior de Deportes (CSD). Este dinero se sufragó en un 42% por parte de la propia estructura del Ayuntamiento, así como de otro 6% que aportó la empresa mixta Ematsa. De esta forma, la corporación local compensó la parte que no cubrieron empresas y particulares, convirtiéndose de esta forma en el máximo accionista de la entidad privada. De hecho, a lo largo de la temporada 2006/07 –la de Primera División– el presidente durante algunos meses fue el entonces concejal de Esports Raül Font (CiU), quien cogió las riendas entre la marcha de Josep Maria Andreu y la llegada de Lluís Salvadó.

Desde entonces, la implicación pública se ha ido reduciendo de manera notable. Ya con el exalcalde Josep Fèlix Ballesteros (PSC) el Ayuntamiento no acudió a las diversas ampliaciones de capital, dejando la propiedad municipal del accionariado en el 14% actual, sin ocupar –además– la silla que al Consistorio le correspondería en los consejos de la SAD. Ahora, con el nuevo alcalde –Pau Ricomà (ERC)– la idea es seguir por la misma linea. «Sin prisa, pero lo que queremos es no tener ninguna acción», señala Fortuny.

«Deporte base, familiar y social»

En una entrevista que salió ayer publicada en el Diari, el segundo teniente de alcalde concreta que la voluntad del equipo de la Plaça de la Font es la de «ayudar al deporte de base, sin destinar dinero público para pagar a deportistas millonarios».

De hecho, se trata de un posicionamiento que se consensuó en la Junta de Portaveus del 11 de mayo de 2017. En ese encuentro, todos los partidos acordaron «no incrementar las partidas destinadas a los clubes deportivos, ni para el otorgamiento de subvenciones ni por criterios de patrocinio». Asimismo, las formaciones con representación en el Saló de Plens avalaron el hecho de «revisar los criterios establecidos en las subvenciones otorgadas a los clubes para establecer unas bases objetivas y orientadas a potenciar el deporte base, familiar y social».

Asimismo, en el documento consensuado se especificó que «los importes que se vayan reduciendo en las subvenciones a las entidades deportivas se dediquen íntegramente a potenciar el deporte base, familiar y social, con una especial atención a las familias con rentas bajas».

La postura del equipo de gobierno es apoyada por Ciutadans, PP y la CUP. «La apuesta debe ser el deporte base. La época de avalar créditos a los clubes profesionales ya ha pasado», indica Rubén Viñuales (Ciutadans), quien considera que el apoyo al profesionalismo «ha sido positivo y necesario en un momento concreto, pero ya es hora de pasar página».

En la misma linea se expresa Eva Miguel (CUP). «El Consistorio debe venderse todas sus acciones del Nàstic y apostar de una forma clara y decidida por el deporte desde un punto de vista de la inclusión social y de salud pública», afirma la representante de la formación anticapitalista.

Por su parte, José Luis Martín (PP) resalta que «la función del Ayuntamiento es la de ayudar a la promoción del deporte base. No tiene sentido pagar desde las arcas municipales por jugadores millonarios», y recuerda que «cedemos las instalaciones municipales, que ya es una aportación más que razonable. Debemos promocionar las canteras de los equipos de la ciudad».

Finalmente, Berni Álvarez (PSC) está de acuerdo en reducir «más» la implicación accionarial del Consistorio, pero considera que esta no debería eliminarse. «Es bueno tener una pequeña parte, ni que sea para evitar que venga un especulador y se quiera llevar el club», afirma el edil socialista, quien cree que «es bueno tener voz en el consejo de administración de una entidad que es marca de ciudad».

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