El subdelegado del Gobierno Central en Tarragona, Joan Sabaté (PSC), ha enviado una carta a doce municipios de la comarca del Tarragonès en la que les insta a colgar la bandera española en el balcón y cumplir, de esta forma, con la actual legislación sobre la materia. La misiva del máximo representante del Estado en la provincia llega a raíz de la denuncia de VOX, en la que esta formación se quejó al Gobierno Central sobre la ausencia del símbolo en los consistorios de Vila-seca, Vilallonga del Camp, Vespella de Gaià, Salomó, Riera de Gaià, Renau, Perafort, La Nou de Gaià, La Secuita, La Pobla de Mafumet, El Morell y El Catllar.
Fuentes del Gobierno Central reconocen que, tras recibir la denuncia, el subdelegado «debe preguntar a los ayuntamientos si es cierto y que lo justifiquen, ya que de lo contrario estarían incumpliendo la legislación». En concreto, la Ley 39/1981, de 28 de octubre reza que «la bandera de España deberá ondear en el exterior y ocupar el lugar preferente en el interior de todos los edificios y establecimientos de la Administración central, institucional, autonómica, provincial o insular y municipal del Estado».
Ahora, el representante estatal otorga a los consistorios un plazo de veinte días para que justifiquen el motivo de la ausencia. Ayer, la presidenta de VOX Tarragona, Isabel Lázaro, se mostró «agradecida» y «aplaude» la gestión de Sabaté. «Nos vemos obligados a actuar ante la pasividad de nuestros representantes», añadió.
Sorpresa general
Los consistorios se mostraron ayer, en general, sorprendidos por la carta del subdelegado. «Nosotros no tenemos ninguna bandera porque el edificio es nuevo y, de hecho, no hay ni mástiles», afirma el alcalde de La Pobla de Mafumet, Joan Maria Sardà, quien añade que «si un juez nos insta a colgar las banderas, cumpliremos escrupulosamente la legalidad».
En la misma línea se expresan desde Vila-seca. Las fuentes consultadas resaltan que las cuatro banderas (la europea, la española, la senyera y la de Vila-seca) están siempre presentes en el Saló de Plens y el salón de actos, mientras que en el balcón «sólo se ponen durante las fiestas».
Se da el caso de que uno de los ayuntamientos denunciados es Vespellà de Gaià, cuyo alcalde –Daniel Cid– es socialista. «No tenemos ninguna en el balcón porque por el viento debíamos cambiarlas cada tres meses. Y nos costaba 500 euros», remarcó ayer el también presidente del Consell Comarcal del Tarragonès.