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El Institut de L’Arrabassada entrará en funcionamiento en septiembre de 2021, aunque no en la ubicación definitiva. Así lo asegura el director de Serveis Territorials d’Educació, Jean-Marc Segarra. El instituto se prevé construir en el terreno situado al lado de la nueva escuela, en la calle Mercè Rodoreda. Ayer, la Generalitat anunciaba una inyección económica de casi cinco millones de euros para llevar a cabo las obras. «Pese a esta buena noticia, la previsión es que el instituto esté listo en dos años», explica Segarra, quien apunta que «por esto, pensamos que lo mejor es poner en marcha los cursos de la ESO, aunque no sea en el edificio definitivo».
La opción que coge fuerza es ubicar provisionalmente la secundaria en los barracones donde en la actualidad se encuentra el colegio, en la calle Carles Babot i Boixeda. Según explica Segarra, «es necesaria la puesta en marcha del Institut de L’Arrabassada para descongestionar el Martí i Franquès».
«Es necesaria la puesta en marcha del Institut de L’Arrabassada para descongestionar el Martí i Franquès»Cabe recordar que actualmente se está construyendo la nueva Escola Arrabassada. En mayo de 2018 se iniciaron las obras y la previsión era que entrara en funcionamiento en septiembre de 2020. Pero no va a ser así. Primero los problemas con la roca del terreno y después la crisis sanitaria derivada de la Covid-19, han obligado a modificar el timing y retrasar la apertura del centro educativo hasta verano de 2021. La puesta en marcha de este recinto liberaría los barracones donde actualmente cursan los alumnos. Tanto esta como la construcción de un instituto en la zona de Llevant son reivindicaciones históricas por parte de los padres.Jean-Marc Segarra. Director de los Serveis Territorials d’Educació
Dar una oferta a Llevant
El nuevo equipamiento de secundaria acogerá dos líneas desde primero a cuarto de la ESO. «Es importante ponerlo en marcha, sobre todo por dos motivos. El primero, para descongestionar el Institut Martí i Franquès y, segundo, para poder ofertar plazas públicas de secundaria a los jóvenes de las zonas de Llevant», apunta Segarra. Y es que actualmente, los adolescentes que viven en las urbanizaciones, como Ferran, Cala Romana o La Móra, prefieren estudiar en el Institut d’Altafulla que en el Martí Franquès, ya que son menos los kilómetros que deben recorrer.
Hace unos meses, los vecinos de la Vall de l’Arrabassada recogieron firmas para pedir a la Generalitat que activara de una vez por todas la construcción del Institut de L’Arrabassada. Tuvo su efecto.
Inyección de casi 5 millones
Ayer, la Generalitat anunciaba que el Departament d’Educació ha modificado el Pla Econòmic i Financer d’Inversions en construcciones escolares con la incorporación de 17 nuevas actuaciones en toda Catalunya por un importe total de 91 millones de euros, que se edificarán a través de la empresa pública Infraestructures.cat. De estas inversiones, dos son construcciones en centros educativos que se realizarán en las comarcas tarraconenses, por un valor de 8,5 millones de euros.
Concretamente, corresponden a las obras del Institut-Escola L’Arrabassada de Tarragona y las de la Escola Bernardí Tolrà de Vila-rodona. En el caso del Institut de L’Arrabassada, la cantidad prevista es de casi cinco millones de euros. «Ahora, ya tenemos asegurados los recursos. La intención es que los trabajos estén listos en un plazo de dos años», dice Segarra. Cabe recordar que el instituto se construirá al lado de la nueva escuela, en un terreno de titularidad municipal.
A parte de estas dos obras, la Generalitat ya tiene previstas diez actuaciones más, que ya se están construyendo, o bien ya cuentan con disponibilidad presupuestaria. Las poblaciones beneficiadas son El Montmell, Els Pallaresos, Maspujols, Mont-roig del Camp, Reus, Roda de Barà, Tarragona, El Catllar, Vallmoll y Vilallonga del Camp.
