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El abogado de la imprenta de Constantí, Tomàs Gilabert, la empresa sospechosa de haber confeccionado material para el referéndum catalán, ha asegurado desconocer los motivos del control de la Guardia Civil, tras permanecer once horas en las instalaciones.
Gilabert, al que los agentes también le han inspeccionado su coche, ha señalado a los periodistas: "He venido porque la empresa no sabe qué hace la Guardia Civil en su puerta".
"Sabéis vosotros más que yo porque no me he movido en todo el día de aquí", ha zanjado a preguntas de los periodistas sobre si existía una orden de registro o un requerimiento de información.
El letrado se ha mostrado muy tranquilo y también ha relatado que la empresa sigue "trabajando con toda la regularidad del mundo".
"Diría que no se ha imprimido aquí material" relacionado con el 1-O, aunque "no tengo ni idea", ha remachado el letrado.
Dos dotaciones de la Guardia Civil controlan los dos accesos de la imprenta Indugraf Offset del polígono industrial de Constantí y registran los coches de los empleados a la salida del recinto.
La Fiscalía de Tarragona ha pedido al titular del juzgado de instrucción número 13 de Barcelona, encargado de investigar los preparativos del referéndum del 1-O, la entrada y registro de esta empresa, según han informado a Efe fuentes fiscales.
El Ministerio Público está pendiente de la decisión del juez, que ya investiga a varias personas, entre ellas al secretario de Hacienda de la Generalitat, Lluís Salvadó, por delitos de revelación de secretos, malversación, desobediencia, prevaricación y sedición.
