El ‘antes muerta que sencilla’ en versión ochentera

#seriesenvena
‘Pose’.
Este drama de HBO refleja la realidad que vivió la comunidad LGTBI en New York a finales de la década de los ochenta

01 marzo 2019 21:02 | Actualizado a 01 marzo 2019 21:24
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Cuando en la pasada alfombra roja de los Oscar apareció el actor Billy Porter luciendo un espectacular vestido causó tal sensación que fue trending topic durante gran parte de la ceremonia. Abrió la mayoría de las crónicas al día siguiente y fue uno de los mayores protagonistas de la noche.

Con este gesto, Porter quería abrir un debate sobre lo que se considera «masculino» y lo que se considera «femenino», pues en pleno siglo XXI hay algunas cosas que deberían ir cambiando. El actor ha llevado a la vida real el carácter de su personaje en la producción de HBO Pose.

Esta manera de pensar y actuar cuadra perfectamente con el espíritu de la serie. Pose es una oda a la igualdad, al intento de superación continuo y a que el mundo acepte la manera de ser de cada uno sin tanto prejuicios.

Y es en este contexto donde se desarrolla la trama de este drama musical y de baile, ambientado a finales de los ochenta del pasado siglo XX en la ciudad de New York, dirigido por Ryan Murphy, responsable de producciones tan conocidas como Nip/Tuck, Glee, American Horror Story o El asesinato de Gianni Versace.

Por un lado, la serie se adentra en la ‘ball culture’, donde muchos de los marginados por ser LGTBI encuentran un sitio donde expresarse, bailar y posar según las categorías elegidas.
Pose cuenta con el mayor reparto transexual de la historia.

La comunidad se divide en «casas» que son comandadas por una «madre», viven todas bajo el mismo techo y participan cada noche, bajo el nombre de su «casa», en el ball que toque con la intención de ganar en cuantas más categorías puedan y acumular el mayor número de trofeos posibles.

Hacia atrás ni para coger impulso
Así conocemos a Blanca (MJ Rodríguez), una transexual a la que su familia ha repudiado y que encuentra en la Casa de la abundancia el hogar que su propia familia le ha negado pero decide independizarse de la «casa» por desavenencias con su madre Elektra (Dominique Jackson), lo que le llevará a tener una gran rivalidad entre ellas. Blanca fundará su propia casa y acogerá en ella a dos discípulos: Angel (Indya Moore), una joven que se da a la prostitución y Damon (Ryan Jamaal Swain), un chico gay que huye de su hogar a la gran manzana para perseguir su sueño de ser bailarín. Y cómo no, tenemos a Billy Porter que encarna el papel de Pray Tell, el histriónico maestro de ceremonias de los ball e íntimo amigo de Blanca.

Blanca, a la que diagnostican VIH, es una persona con un gran optimismo y que tras convertirse en madre de su casa, a la que llamará Casa Evangelista (por la modelo no por la iglesia), procura el bienestar de sus hijos y les ayuda a cumplir sus sueños y deseos, dentro de las limitaciones económicas que tienen. Realmente se convierte en una verdadera madre para todos ellos.

También conoceremos a Stan (Evan Peters), un hombre casado con Patty (Kate Mara). Stan empieza a verse con Angel aunque esto le provocará fuertes luchas internas sobre cuáles son sus gustos sexuales realmente.

Una banda sonora magnífica
Si algo cabe destacar en Pose es su estupenda banda sonora. Para los que ya empezamos a tener una edad, escuchar esos clásicos temas de finales de los ochenta es un aliciente más para ver esta serie. No hay capítulo en el que no termines tarareando una canción. La buena música no tiene época.

Pose es una serie que no ahonda mucho en el drama. Ryan Murphy ha querido darle un tono optimista a la vida de sus personajes y a lo largo de los ochos capítulos que forman su primera temporada vamos a verles sufrir y disfrutar a partes iguales. Aunque trata temas tan delicados como el Sida o la aceptación o más bien la no aceptación por parte de la sociedad de los años ochenta de la comunidad LGTBI lo hace desde un tono optimista, donde vemos cómo Blanca y los suyos sobreviven día a día sin perder el lazo de familia que los une. Porque en este caso su familia la han elegido ellas.

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