Los vecinos, amigos y turistas de la calle Comte han vuelto a pintar este sábado los 49 pilones que hay en la popular vía de la Part Alta. Por undécimo año consecutivo, un río de artistas no han querido perderse la oportunidad de participar en la ya consolidada celebración de la Pilons Parade, una iniciativa que nació a raíz de los desalojos que sufrieron 36 vecinos de la zona en febrero de 2005 por el peligro de derrumbe que sufrían sus edificios.
«Ese episodio, junto a los pilones que se pusieron para evitar el estacionamiento en esta calle, animaron a los vecinos a tirar hacia adelante la Pilons Parade, que ha logrado unir a todo el vecindario» explica el portavoz de la asociación de residentes, Enric Prades, quien lleva seis años viviendo en la calle Comte.
La edición de este sábado ha contado con la participación del Club Vaixell –por su cincuenta aniversario– y del Ball dels 7 Pecats –por sus 15 años–y la presencia de improvisados artistas y visitas de China, Francia y Dinamarca, entre otros países. Diana ha sido una de ellas. «Soy del sur de China, pero llevo dos años en Tarragona. Me encanta la Pilons Parade» aseguraba mientras pintaba un oso panda y un signo «de la fiesta de la primavera».
Por su parte, Montse ha acudido al improvisado «taller» de la vía pública con sus hijos Pere, Manel y Miquel. «He seguido la iniciativa por Twitter. Me parece una idea fantástica» afirmaba mientras acordaba con sus jóvenes artistas la obra a crear para que decore la calle a lo largo de los próximos 365 días.