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Lo avanzó el director general de Costa Cruceros Raffaele D’Ambrosio hace cosa de un mes: la compañía sigue apostando por el Port de Tarragona y de cara a la nueva temporada la naviera operará con un barco más grande. Éste no será el único cambio. Los servicios regulares de los viernes en el Port de Tarragona, saldrán el año que viene los domingos. No se trata de un dato superfluo. Habitualmente los monumentos abren tan solo hasta el mediodía. Por primera vez este año se consideró que los visitantes que llegaban a la ciudad, para tan solo unas horas, no podían encontrarse con las puertas cerradas y se garantizó el acceso. Pero, ¿qué pasa con el comercio?
Cuando se vio que el proyecto crucerista estaba empezando a dar buenos resultados se constituyó la Zona d’Acolliment de Creureristes (ZAC). Sus asociados están informados con previsión de la llegada de cada barco y representa que son establecimientos de «acogida» para los cruceristas, que deben garantizar una experiencia agradable para los visitantes en la ciudad. Sin embargo, su apertura o no los domingos no es obligatoria. Cada establecimiento decide si abre o no.
El último crucero en domingo atracó en el enclave tarraconense el pasado 1 de julio. Coincidía con el inicio de las rebajas y, a pesar de ello, tan solo abrieron algunas de las tiendas del centro y las grandes superficies. La opinión generalizada de la mayoría de los comerciantes fue que «no valía la pena».
Según datos proporcionados por la compañía, el impacto económico de los clientes de Costa Cruceros sobre la ciudad en 2017 fue de 3,4 millones de euros, cuando la cifra de pasajeros se quedó en 32.000. ¿Qué Tarragona se encontrarán las más de 62.000 personas que por capacidad llegarán el próximo verano en domingo?
Según avanzó Costa Cruceros son dieciocho los domingos en los que hará escala, entre el 26 de mayo y el 22 de septiembre. La concejal de Comerç del Ayuntamiento de Tarragona, Elvira Ferrando, avanza que es una cuestión que se abordará en la próxima reunión del Consell de Comerç, previsto para el mes de septiembre. «Está claro que si todos los cruceros vienen en domingo, el proyecto que tenemos de la ZAC debe repensarse», asegura la titular de comercio.
La edil socialista quiere definir una estrategia conjunta con los representantes políticos y las asociaciones comerciales, entre otros agentes. «Una posibilidad podría ser crear una ruta de establecimientos que nos permita avanzar en el proyecto ‘a pie por el centro’», describe Ferrando.
Desde el Ayuntamiento ya se avanza que va a invitarse a los comercios para que los cruceristas que lleguen el año que viene no se encuentren con todas las persianas bajadas. «No tan solo es importante que los comercios estén abiertos, sino que puedan ofrecer una experiencia», añadía Ferrando.
El pasado mes de noviembre Costa Cruceros daba los datos correspondientes a la pasada temporada. El 57% de los cruceristas que llegaron el año pasado compraron. Además, pudo verse como principalmente compraron souvenirs (38,1%), seguido de ropa (19,7%) y calzado y complementos (7%).
La concejalía de Comerç forma parte de la Taula de Creuers, pero el Ayuntamiento de Tarragona tiene a dos representantes en este organismo. Del Àrea de Turisme está su máxima responsable, Inmaculada Rodríguez. «Es muy importante que los domingos de crucero Tarragona pueda ofrecer su gran riqueza patrimonial, comercial, gastronómica y de ocio», apunta la presidenta del Patronat de Turisme. Con esta filosofía de ciudad abierta, este año Turisme financia la apertura de los monumentos los días en los que estaban cerrados y está prevista la llegada de un crucero. «Consideramos que, para una Ciudad Patrimonio de la Humanidad que apuesta decididamente por esta actividad es imprescindible. Por lo que el año que viene trabajaremos en este mismo sentido y respaldaremos las nuevas iniciativas que se impulsen desde el Àrea de Comerç para mostrar esta ciudad abierta», describe la concejal de Turisme.
Este cambio en el calendario trascendía hace unas semanas. «No se ha hablado de nada, pero realmente es un poco complicado», reconoce el presidente de la Via T de Tarragona, Salvador Minguella. Desde los comerciantes adheridos a esta asociación se está haciendo «un esfuerzo» para no cerrar los mediodías y poder atraer a los clientes que están más limitados por su horario. «Si ya está costando esto, no me imagino qué pasará. Estamos a años luz aún de abrir todos los domingos», reconocía Minguella, que quiere sentarse a hablarlo cuanto antes.
