El complejo petroquímico de Repsol, considerado un enclave estratégico, ha reforzado sus sistemas de seguridad, dentro del nivel 4 de alerta antiterrorista marcado por el Ministerio del Interior. Los sistemas rutinarios que se podrían estar haciendo se han dejado atrás. Así, se controlan mucho más los equipajes o maletas que pueda llevar el personal -incluso de la propia emprea- así como también los vehículos que acceden al interior del recinto.
Por otra parte, los vigilantes de seguridad realizan más rondas por todo el recinto y controlan los exteriores para detectar cualquier elemento sospechoso. Sí que se ha descartado, a raíz de algunos rumores que circulan, que el Ejército esté vigilando la zona petroquímica.