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El Diari de Tarragona publicaba el pasado 8 de febrero unos datos preocupantes derivados de la pandemia de la Covid-19 que sufrimos desde hace un año. La previsión para 2020 era de que se iban a detectar 2.790 tumores en hombres y 1.922 en mujeres en toda la provincia de Tarragona, lo que suman 4.712 tumores malignos. Según los cálculos de la Fundación para la Investigación y la Prevención del Cáncer (FUNCA), la pandemia ha provocado que esta detección se haya reducido alrededor de un 15%, por lo que unas 700 patologías estarían sin diagnosticar, unos números que han provocado preocupación entre el colectivo médico.
Precisamente, el diario El País publicaba ayer una noticia en la que se corroboraba que la pandemia ha retrasado toda la atención al cáncer, desde el diagnóstico hasta el tratamiento y el seguimiento posterior. Según un estudio de varias sociedades científicas españolas, durante la primera ola, los nuevos diagnósticos cayeron un 21% y las pruebas para detectar posibles tumores, como las citologías, bajaron hasta un 30%. El resultado: demoras diagnósticas, menos opciones terapéuticas y pronósticos más desfavorables.
«El cáncer es prioritario y ha pasado a ser secundario. Se calcula que la pérdida de oportunidad se trasladará en una pérdida de supervivencia del 30% en los pacientes que han sido diagnosticados tarde», señalaba el pasado miércoles Eduardo Díaz-Rubio, catedrático emérito de Oncología y presidente de la Real Academia Nacional de Medicina de España, durante su participación en el evento virtual La sanidad pública más allá de la Covid, organizado por El País.
Estrategia nacional
En este sentido, el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas acordaron este pasado miércoles la actualización de la estrategia nacional en la lucha contra el cáncer, que llevaba 10 años sin revisión. «Se actualizan aspectos clave como la prevención mediante el estilo de vida saludable, el diagnóstico precoz, la atención mediante un modelo multidisciplinar, los avances en medicina de precisión o en retos como la atención psicológica o las necesidades de los pacientes que han sobrevivido», dijo la ministra de Sanidad, Carolina Darias. Y señaló que se va a realizar un estudio del impacto de la pandemia en el tratamiento y diagnóstico de cáncer.
